Después de conseguir el subcampeonato en la Copa del Mundo de Brasil 2014, tras caer en la final frente a Alemania con un tanto en tiempo suplementario a pocos minutos de los penales, tres integrantes del seleccionado argentino: Lionel Messi, Javier Mascherano y Maximiliano Rodríguez arribaron a Rosario para disfrutar de unos días de descanso antes de reincorporarse a sus respectivos equipos.
La Pulga será recibido con los brazos abiertos, ya que Luis Enrique, su nuevo DT en Barcelona de España, aseguró durante las últimas horas que “sigue siendo el mejor del mundo”. Al elenco Culé también se sumará el Jefe. Habrá que esperar para ver si el reemplazante de Gerardo Martino lo utiliza como defensor o lo pone de volante central.
Por su parte, la Fiera volverá a su Newell´s querido que acaba de romper el mercado de pases con la contratación del buen arquero Oscar Ustari, tras la partida de Nahuel Guzmán a Tigres de México.
Por su parte, Lucas Biglia fue recibido ayer como un verdadero héroe en la ciudad bonaerense de Mercedes, donde miles de vecinos se volcaron a las calles para saludarlo a lo largo de una caravana que recorrió las avenidas principales y en la plaza San Martín, frente a la Municipalidad.
El mediocampista, que actualmente juega en Lazio de Italia, fue llevado en un camión autobomba de los Bomberos Voluntarios de Mercedes desde uno de los ingresos a la ciudad hasta la céntrica plaza San Martín.
Mientras que José Basanta se encuentra "de vacaciones en México", aunque "atento a cualquier novedad que se produzca" sobre su posible pase a Fiorentina de Italia. De lo contrario deberá volver a Tigres.
En tanto, Alejandro Sabella, el entrenador que llevó a la Selección argentina a jugar una final del Mundial después de 24 años, comenzó su etapa de descanso, y por estas horas, recluído en su domicilio junto a su familia, evalúa la idea de tomarse un descanso y meditar los pasos a seguir para su futuro. ¿Seguir o no seguir? Esa es la cuestión.