Un caso sospechoso de coronavirus disparó el protocolo en el mercado concentrador de frutas y verduras El Charrúa, que no abrió el lunes. Tras la desinfección, este martes volvió a operar normalmente y, desde la madrugada, se generaron largas colas en el acceso por Avenida Almafuerte.
Su presidente, Humberto Brandolín, confirmó a <b>Elonce TV</b> que "el puestero está aislado. No puede abrir hasta que tengamos los resultados. Después se determinará si hay que tomar otras medidas".
Reconoció que "se nos ha complicado la tarea" debido a la limitación en cuanto a la cantidad de gente que puede acceder al mercado a la vez, como así también a la distancia que deben mantener las personas entre sí, pero "es por el bien de todos. Cumplimos con toda la ciudad y Salud nos indica las medidas diarias que debemos tomar", añadió.
"Esto va día a día, porque estamos atentos a que pueda surgir algún problema. A las recomendaciones las venimos cumpliendo", recalcó.
Sobre las tareas de desinfección, precisó que "se fumigó el puesto que estaba cerrado. Rompimos para entrar. Luego se fumigó todo el predio. Se terminaron todos los procesos y con ello nos habilitaron a trabajar normalmente".
Interrogado sobre el empleado que presentó síntomas, explicó: "Él estuvo el viernes trabajando normal. Empezó el sábado a la tarde, que se sentía cansado, según me comentaron. El domingo presentó fiebre y problemas respiratorios. Tengo entendido que su mujer no ha podido hablar con él, porque todos están aislados".
Por otra parte, Brandolín recordó que el domingo a la noche lo llamó un puestero por un empleado que tenía síntomas compatibles con coronavirus. Ratificó que desde entonces "empezamos a implementar todo el protocolo y que le indicaron que se debía fumigar el mercado antes de la apertura, o cual imposibilitó que el lugar abriera el lunes. Se terminó alrededor de las 14 y las autoridades competentes autorizaron el ingreso de puesteros".