Marcelo Martins es, dentro de la selección de Bolivia, el que mejor sabe cómo amargar a la Argentina en Eliminatorias, ya que es el máximo goleador ante la Albiceleste con cinco tantos (seguido por Ronaldo con tres). De hecho, en el duelo de ayer siguió de racha, pero al final la impotencia por el resultado pudo más y desbarrancó.
En medio del tumulto final del encuentro, en el que Lionel Messi fue de los más enojados del lado argentino con el preparador físico local Lucas Nava, Martins se desbocó y, mientras sus compañeros lo agarraban, se despachó con unas líneas de lo más olvidable.
"Soltame, soltame", se escucha primero, para después pasar a un "¡Muertos de mierda! ¡Se comieron seis!", recordando el 6 a 1 de 2009 con el grupo de la Albiceleste como destinatario.
