En una nueva edición del Clásico del fútbol español, Barcelona y Real Madrid no se sacaron diferencias e igualaron 0 a 0 en el Camp Nou. Así, la pelea por la cima del torneo no sufrió cambios y ambos equipos siguen igualados en la punta.
El primer tiempo fue intenso, con un ida y vuelta a puro vértigo que parecía presagiar una noche de muchos goles en Barcelona. Para colmo, ambos equipos contaron con jugadas muy claras para adelantarse en el marcador. Primero, el Merengue, con un remate de cabeza de Casemiro que Gerard Piqué sacó en la línea. Después, con un remate de Lionel Messi que Sergio Ramos también salvó sobre el límite del arco, cuando Thibaut Courtois estaba ya vencido.
El equipo de Zinedine Zidane tuvo también dos jugadas muy claras en los pies del uruguayo Federico Valverde, con dos remates muy potentes desde afuera del área y agarrando la pelota de primera para la sorpresa de todo Barcelona. Sin embargo, el arquero Marc André Ter Stegen demostró por qué es uno de los mejores del mundo y no permitió que su valla caiga.
El segundo tiempo cayó en cuanto a intensidad, quizás fruto del cansancio de ambos equipos. De todas maneras, las jugadas de contraataque abundaron y los dos conjuntos contaron con chances de pasar al frente.
La polémica de la noche llegó luego de que el árbitro del encuentro decida anular un gol del galés Gareth Bale por offside, algo que el VAR avaló y ni siquiera le indicó que vaya a revisarla. La decisión fue correcta, ya que en la repetición se pudo observar que el atacante de Real Madrid tenía el cuerpo inclinado y estaba adelantado.
Así, no quedó tiempo para más y el encuentro más esperado por casi todo el mundo futbolístico terminó 0-0, manteniendo así la paridad entre Barcelona y Real Madrid en la cima de la tabla de posiciones con 36 unidades para cada uno.
Los de la capital española tendrán ahora su próximo compromiso el domingo 22 de diciembre, cuando reciban al Athletic Bilbao, mientras que los catalanes harán lo propio un día antes, al recibir a Alavés.
