REDACCIÓN ELONCE
La construcción de viviendas en Entre Ríos, al igual que en muchas otras provincias argentinas, sufrió un fuerte aumento en sus costos en los últimos años. ¿Qué está pasando con los costos? ¿Cuánto cuesta realmente construir una vivienda hoy en día?
Según los últimos datos publicados por el Colegio de Arquitectos de Entre Ríos, en octubre de este año el precio del metro cuadrado de una vivienda urbana alcanzaba 1.295.984 pesos.
En diciembre de 2023, en tanto, el costo del metro cuadrado era de 725.788 pesos, lo que hacía que la misma vivienda de 116 metros cuadrados costara alrededor de 84.554.000 pesos, es decir, casi 66 millones de pesos menos que hoy.
Este aumento responde a una suba en los costos de los materiales y el impacto de los incrementos en los precios de la mano de obra. Los rubros que experimentaron los mayores aumentos incluyen pinturas, instalaciones eléctricas, y maderas, componentes esenciales en la edificación de una vivienda.
Frente a esta situación, surge una pregunta fundamental: ¿Es hoy casi imposible para una familia construir su casa propia? En este contexto, la diferencia de precio por metro cuadrado entre una vivienda económica y una de mayor calidad también es un tema relevante: ¿Cuánto más se paga por una casa de mejor calidad? ¿Y qué tipo de materiales y acabados definen esa diferencia?
El tema fue debatido en el programa El Ventilador, que se emite martes y jueves a las 21.30 por Elonce.
La arquitecta Cecilia Bonino, presidenta de la regional Oeste-Noroeste del Colegio de Arquitectura y Urbanismo de Entre Ríos, explicó que “desde el Colegio de Arquitectos se viene trabajando desde el 2008 para poder tener un valor indicativo, una base, sobre cuánto está el valor de la construcción. En este momento estamos a mes vencido, todavía no salió el valor de noviembre. Pero el de octubre indica que el metro cuadrado vale $1.300.000. Estamos hablando de una vivienda unifamiliar, estándar. Es un valor de referencia que puede variar según el tipo de construcción, los materiales, la calidad. Es un valor que se arma según lo que nos mandan las empresas del rubro de la provincia de Entre Ríos”.
Remarcó que ese valor “incluye mano de obra, materiales, equipamientos para trabajar e impuestos”.
Respecto a las consultas más frecuentes de la gente, indicó: “preguntan si se tienen que animar a construir ahora o conviene esperar. Mes a mes vamos viendo que ahora se está empezando a aplanar un poco la curva de precios. Entre diciembre de 2023 y enero 2024 la variación de un mes a otro estaba en 20 por ciento y la última que medimos, en octubre, estaba en 1,5 por ciento respecto al mes anterior. Esas cuestiones generan mucha ansiedad. Lo nuestro es un proceso. Una obra tiene un proceso en el tiempo”.
“En estos últimos cuatro meses se empezaron a abaratar los costos. Se va notando de a poco. Hay muchos precios de materiales que tienen que ver con la variabilidad del dólar”, agregó.
Asimismo, explicó que “la gente siempre pregunta en qué puede achicar, pero eso también depende qué se está buscando. Nuestra función como Colegio es acompañar a nuestros colegas. Nosotros somos profesionales universitarios con una formación. Si contratás un arquitecto vas a ahorrar plata también porque estamos preparados para un montón de cuestiones que pueden surgir durante la obra, cómo evaluar, cómo anticiparnos a problemas que a futuro se van a evitar. Los problemas en las obras se ven de acá a 10 años”.
Sobre los tiempos de ejecución de las obras, resaltó que “se hace una proyección de tiempo y plazos según el tipo de obra. Depende si es Steel Framing, construcción tradicional y demás. Ese es el momento cero. A veces hacemos el proyecto de cómo va a ser la obra completa, pero priorizamos y empezamos a construir primero una parte, después otra. Vemos cómo podemos ir construyendo, avanzando y acompañando a la persona. Hay que ser flexibles e ir acompañando a los clientes”.
Consultada sobre si la obra pública es lo que mueve la construcción, comentó: “hay un poco y un poco. La obra pública mueve la construcción más formal, todo lo que es la ocupación de mano de obra más intensiva. Nosotros trabajamos más con lo que es la vivienda privada. Hay que aclarar que la construcción es muy sensible a la política nacional, es donde primero se nota cuando se acelera y desacelera la economía. También en Argentina sigue siendo el ladrillo la inversión donde estamos más seguros. Es cultural, pero termina siendo real. Si en algún momento se empieza a desacelerar tenés la posibilidad de vender, de alquilar”.
Contó que “hay variedad de construcciones, porque en el Colegio lo notamos cuando entran los visados. Entran muchos visados por muchos metros cuadrados y por ahí otros que son más chiquitos. Este año fue muy variable, de mucha incertidumbre. Proyectos hay, quizás no se notan tanto las concreciones y quizás tampoco se notan tanto en el centro, pero sí fuera de bulevares o en las afueras de Paraná”.
Destacó que “cuando salió el primer plan Procrear hubo un boom, había mucho trabajo. La construcción es un poco el termómetro de la macroeconomía”. Elonce.com