El personal del Servicio Penitenciario de la Unidad Penal N°1 de Paraná, llevó a cabo una requisa de rutina en el pabellón N°8, donde se desató una serie de descubrimientos que encendieron las alarmas en las autoridades carcelarias.
En una de las celdas, se encontró un televisor que escondía un total de 8 envoltorios con marihuana compactada y a 23 envoltorios de marihuana picada, fraccionada para su venta. Uno de los internos se hizo responsable de este hallazgo, lo que generó un clima de tensión entre los demás reclusos del pabellón.
Posteriormente, la requisa continuó en el área común, donde se localizaron zapatillas que ocultaban tres medias con más de 30 envoltorios. En detalle, se hallaron 11 envoltorios de marihuana en una de las medias, mientras que, en las otras, se encontraron 11 y 4 envoltorios de cocaína, respectivamente.
Además, en la mencionada área, se confiscó un celular Nokia. A diferencia de los hallazgos previos, ningún interno se adjudicó la propiedad de estos elementos, lo que complicó la identificación de responsables.
Los internos se hicieron cargo
En una búsqueda más exhaustiva, los agentes penitenciarios encontraron en otra celda, una bolsa de tela que contenía 10 envoltorios de cocaína, de los cuales se hizo cargo otro interno. También se descubrieron dos envoltorios de la misma sustancia al costado de una cama, así como dos celulares Samsung, responsabilidad que asumió otro recluso.
La situación se tornó aún más grave cuando se localizó un teléfono Nokia junto a la cama de otra celda, de lo que otro interno se hizo responsable. En un baño del patio, también se encontró un teléfono Samsung, del cual ningún interno aceptó la propiedad.
Confirman las sustancias
A raíz de estos hallazgos, se solicitó la colaboración del personal de Toxicología, que realizó pruebas de campo sobre las sustancias encontradas. En primer lugar, la marihuana hallada en el televisor totalizó un peso de 111,2 gramos, mientras que el resto de los envoltorios de marihuana, sumaron un peso de 31,8 gramos.
Los resultados continuaron siendo preocupantes, ya que las sustancias halladas en las zapatillas arrojaron un total de 10,9 gramos de marihuana y 62,2 gramos de cocaína.
Por otra parte, según la información brindada por fuentes policiales que participaron del procedimiento, la situación se volvió aún más alarmante cuando se analizó la sustancia blanca encontrada en la bolsa de tela, que dio positivo para cocaína con un peso de 0,9 gramos.
Por último, los dos envoltorios de cocaína, hallados en la cama sumaron un peso de 1,4 gramos.
Esta serie de hallazgos sugiere una preocupante circulación de drogas dentro del penal, lo que podría tener repercusiones graves en la seguridad del establecimiento.
Secuestraron la droga y los teléfonos
Con los resultados de las pruebas de Toxicología en mano, el fiscal interviniente ordenó el secuestro de todas las sustancias encontradas, así como de los teléfonos celulares.
La Comisaría Décima también colaboró en el procedimiento realizado en la cárcel de Paraná.
Las autoridades se encuentran investigando el control de los internos y la manera en que las sustancias ingresan al penal.