Se desarrolló un evento de lucha medieval en la Plaza Mujeres Entrerrianas de la ciudad de Paraná en horas de la tarde del domingo.
Camilo, a quien le dicen Ragnar, dialogó con Elonce sobre la actividad en Paraná: “Hacemos combates medievales para el público y el que quiera. Sea hombre mujer, chico o grande. Todo el mundo puede entrar acá al ring”.
Se describió como “un guerrero, más que nada de la cultura céltica. Acá todo el presente puede ser un romano, un samurái o lo que fluya en su ADN para combatir, agarrar su espada y pelear con su propio estilo. Es darlo todo y luchar hasta la muerte”.
Sobre cómo se originó, afirmó: “Éramos un grupo que hacía un juego y que se disolvió hace algunos años. Pero es algo que me encanta pelear, agarrar una espada y sentirme vivo en el combate. Para que no muera la movida, dije ‘vamos a hacer un combate para la gente’”.
Eso lo llevó a conocer grupos de artesanos y otros referentes de la movida medieval de Buenos Aires, Rosario y Córdoba. Acerca de las luchas de hace muchos años, indicó: “Creo que las imágenes dicen más que las palabras. Me siento muy vivo y emocionado. Surge toda la adrenalina”.
Otra actividad en la Plaza Mujeres Entrerrianas
A escasos metros, el club Tilcara de Paraná llevó adelante un evento para tratar de sumar a nuevos jugadores a la institución en la tarde del domingo. Con un pelotero que simulaba ser la H del rugby, los chicos disfrutaron de la jornada.
Martín Moscovich, que es uno de los coordinadores de la disciplina de la institución, acotó: “Hacemos esta acción para que nos permita sumar chicos nuevos al club que se quieran sumar a participar de la vida del club y conocer lo que es el rugby”.
Entrega de cintos en Pakua
En última instancia, en la Plaza Mujeres Entrerrianas también hubo lugar a la entrega de cintos en la Liga Internacional de Pakua.
María Victoria Pérez Campos, una de las maestras de la disciplina, explicó: “Estamos haciendo una de las últimas entregas de cintos de nuestra escuela. Solo queda una más en el año”.
Asimismo, señaló: “En todas las maestrías, van del cinto blanco al negro. Hoy se entregan blancos, amarillos, naranjas, grises y algunos para los primeros instructores”.