De un momento al otro las caras se habían transformado en Racing. De la sonrisa por el empate agónico en el clásico contra Independiente y la felicidad por la goleada ante Bolívar por el arranque de la Copa Libertadores pasaron a la preocupación por el futuro de Gustavo Bou, su goleador y figura.
La tentación llegó desde China, un mercado que empezó a mover millones y que arrasa con figuras futbolísticas de todo el mundo. El Beijing Gouan ofreció ocho millones de dólares por Bou, que tiene una cláusula de rescisión de 10 millones. Hasta último minuto y sobre el cierre del libro de pases en Asia (a las 12 de Argentina) continuaron las negociaciones con el presidente de la Academia, Víctor Blanco, que estaba en Zúrich como representante argentino en la elección del presidente de la FIFA.
En ese contexto, el presidente rechazó la oferta final a la que llegaron los chinos y dio por terminada la novela: Bou se queda en Racing. El delantero practicó junto con el grupo en Avellaneda y sería titular el domingo en el choque contra Boca.