El ex presidente Fernando de la Rúa aseguró que la utilización de fondos reservados para el pago de sobresueldos a funcionarios durante el gobierno de su antecesor, Carlos Menem, no fue ilícita ya que se hacía "en blanco y con recibos" por lo que los definió como "un defecto administrativo" en vez de una apropiación.
De la Rúa declaró como testigo en el juicio que se sigue a Menem, al ex ministro de Economía, Domingo Cavallo; al de Justicia, Raúl Granillo Ocampo, y a la entonces secretaria de Medio Ambiente, Maria Julia Alsogaray por uso indebido de fondos públicos.
Para el ex dirigente radical, lo que hizo Menem es un "pago como una resignación (presupuestaria) antes de que esta modalidad quedara aprobada en la reforma constitucional de 1994, por lo cual "si esos pagos existieron, no fue una apropiación sino un defecto administrativo".
Aseguró que ante la irritación pública que generaban los sobresueldos, "le dije a Santibáñez (Fernando, su jefe de la SIDE) que no se hicieran pagos de fondos reservados a organismos, legisladores, jueces, periodistas, como se decía".
De la Rúa y Santibáñez fueron absueltos en un juicio por el denunciado pago de casi 5 millones de dólares en coimas a senadores justicialistas usando fondos reservados de la Secretaría de Inteligencia .
Durante la audiencia de la fecha ante el Tribunal Oral Federal 4, también declaró Adrián de Santis, un ex secretario privado de Martín Redrado cuando desde 1991 estuvo en la Comisión Nacional de Valores (CNV), con oficina en el Ministerio de Economía.
El testigo aseguró que pasaba a cobrar 46.000 pesos/dólares cada mes, primero en el propio ministerio, donde Luis Murina le "entregaba dinero por gastos reservados".
"Llamaba y decía 'vení que ya está lo de ustedes. Me hacía firmar un cuadernito con la fecha y el monto. Sacaba el dinero, fajos de billetes, de un cajón o una pequeña caja fuerte debajo de un placard", señaló.
Contó que luego de una "una pelea" de su entonces jefe "con Cavallo", dejó de cobrar el dinero por un mes pero luego volvieron a cobrarlo a través de la Secretaría General de la Presidencia", por entonces a cargo de Eduardo Bauzá.
Fue preciso al relatar que recibían el dinero en el primer piso de la Casa de Gobierno de una persona a la que identificó como "Atilio Lepre", y que adjudicaron ese cambio a una decisión de "el propio Menem", es decir "alguien de mayor jerarquía a Cavallo".
