Se estima que por la Argentina se trasladarán alrededor de 1 millón de peregrinos y a ellos la cartera de salud sugiere múltiples medidas como ser el lavado de manos el uso de alcohol en gel, consumo de agua y obtener información sobre el dengue y el chikungunya.
"En lo posible, el agua que se va a tomar tiene que ser agua envasada", señalaron y, si no se pudiera comprar, lo aconsejable es que las personas y las familias lleven botellas desde sus casas.
"También hay que prestar atención a la ingesta de hielo, porque éste puede no estar elaborado con agua segura", aseguraron desde la cartera sanitaria.
En ese sentido, informaron que teniendo en cuenta que se encuentra vigente la campaña contra el dengue y el chikungunya, se recomienda a los viajeros a cumplimentar con mayor intensidad estas medidas en los territorios vecinos.
Paraguay es un país afectado por el dengue y la fiebre chikungunya por lo que evitar la transmisión "es fundamental, preservando de esta manera la propia salud y la posibilidad de importar la enfermedad al regreso del viaje".
"Lo importante es utilizar ropa de mangas largas y el uso de repelentes para evitar las picaduras del Aedes agypti, el mosquito que transmite estas enfermedades", manifestaron desde el Ministerio de Salud formoseño.
Además, "se debe aplicar repelente en las zonas expuestas, especialmente en los horarios del amanecer y atardecer que son las horas del día en que los insectos tienen mayor actividad. La aplicación debe renovarse cada dos o tres horas, porque más o menos ese es el tiempo que dura el efecto", enfatizaron los expertos.
Finalmente se informó que el certificado internacional de vacunación contra la fiebre amarilla es un requisito que puede ser solicitado a los viajeros en los pasos de control para salir del país y que los niños deben tener las vacunas al día según lo indicado en el Calendario Nacional de Vacunación.