Los estudios científicos sobre la variante Ómicron van surgiendo minuto a minuto, mientras esta versión del virus ya llegó más de 70 países.
En Reino Unido, que tiene el mejor sistema de vigilancia de variantes del mundo, ya representa el 50 por ciento de los casos nuevos. Pasó del uno por ciento a esa cifra en solo 12 días. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ya anticipó que Ómicron avanza a un ritmo nunca visto con otras variantes.
Contagiosidad de Ómicron
El R0 indica la cantidad de personas que en promedio se contagian a partir de un infectado. Pero es una contagiosidad “bruta”, porque se estima para una población totalmente susceptible: sin vacunas ni la implementación de medidas no farmacológica como los barbijos.
El Rt es ese mismo valor pero en la vida real. El mejor lugar para medirlo hoy es Sudáfrica. En ese país el Rt de Delta fue menor a 1, esto es, en promedio cada infectado contagia a menos de una persona.
Pero el Rt de Ómicron en Sudáfrica es de 3, valor que coincide con las primeras estimaciones realizadas en Reino Unido, Alemania y EE.UU.
“La rápida transmisión puede deberse a varios factores y aún está bajo estudio: mayor capacidad intrínseca de transmisión, disminución de la inmunidad por el paso del tiempo, mayor movilidad de las personas o una disminución de medidas y de cuidados”, aseguran Humberto Debat y Carolina Torres, virólogas integrantes del consorcio Pais, que monitorea las variantes en Argentina.
Vacunas versus Ómicron
Sobre este punto hay menos evidencias que sobre la contagiosidad. Por el momento, la mayoría son mediciones de la actividad viral neutralizada (AVN), ensayos in vitro en donde se enfrenta el suero de personas vacunadas a la variante Ómicron o a un seudovirus que porta la proteína S de esta variante.
Un trabajo analizó la AVN del suero de personas vacunadas con seis fórmulas vacunales y otras con infección previa. En líneas generales, todas las vacunas pierden capacidad de neutralizar a Ómicron.
En este estudio, las dos dosis de las vacunas que lograron mejores resultados son Moderna y Pfizer. Le siguen AstraZeneca y Sinopharm. Las que tienen menor AVN fueron las de Janssen y Sputnik V.
Desde el Centro Gamaleya, responsable de la vacuna rusa, cuestionaron este estudio. Argumentan que no se utilizaron los mejores sueros disponibles (las muestras fueron provistas por un equipo científico de Argentina). Y anunciaron que en una semana mostrarán resultados propios.
Vacunación
Gabriel Morón, experto en inmunología y vacunas del Conicet y la Universidad Nacional de Córdoba, asegura: “Todos trabajos son claros sobre que esta variante tiene tantas mutaciones en los sitios claves donde actúan las vacunas, que escapa a la protección de los anticuerpos que se producen tras la inmunización”.
Si bien es verdad que cada fórmula responde diferente, Morón también explica que cada persona genera una respuesta particular a la vacuna. Y respalda una máxima de esta pandemia: es mejor estar vacunados (sin importar la fórmula), que no estarlo.
También hay algunos resultados sobre eficacia en población. Pfizer anunció una protección del 33 por ciento frente a infección por Ómicron (para la versión original era del 80%) y del 70 por ciento frente a hospitalización (originalmente era del 93%).
Tercera dosis puede ser clave
También hay datos preliminares sobre que las combinaciones de vacunas, como las que se implementaron en Argentina, serían más eficaces.
Y que tener el refuerzo (o tercera dosis) aumenta significativamente la capacidad de neutralización sobre Ómicron.
En este sentido, Pfizer indicó que la tercera dosis de su vacuna aumenta 25 veces el nivel de los anticuerpos neutralizantes contra Ómicron respecto de solo dos dosis.
La OMS ya aseguró que la protección de las vacunas dura seis meses, de allí la decisión de aplicar el refuerzo pasados cinco meses de la segunda dosis. Para Morón parece clave tener inmunidad plena para enfrentar a Ómicron. Y eso se logra completando los esquemas de vacunación y aplicándose el refuerzo.
Respuesta T
Pero además, las vacunas y la infección previa también generan inmunidad celular de los linfocitos T, otra estrategia del organismo para combatir al virus.
“La inmunidad humoral (anticuerpos) parece no proteger tanto, pero la inmunidad celular seguiría funcionando sin grandes variaciones. Creemos que las personas vacunadas se van a infectar, pero van a tener una respuesta celular que reduciría mucho la posibilidad de tener una enfermedad grave”, asegura Morón.
Este último dato nos lleva a la tercera característica clave de Ómicron: severidad o patogenicidad. Es el rasgo sobre el que hay menos datos.
Qué tan letal es Ómicron
La información sobre la severidad de Ómicron es escasa porque la variante recién está dando sus primeros golpes en el mundo. Las personas llevan algunas semanas o días con la infección y el impacto en la mortalidad puede tener por lo menos dos semanas de delay.
La casuística (lo que cuentan los médicos desde los hospitales de Sudáfrica y Reino Unido) presenta a Ómicron como un virus menos patógeno. Sin embargo, la tasa de hospitalización por Covid-19 en Sudáfrica pasó de 11 casos cada millón de habitantes a mediados de noviembre a 56 casos en los primeros días de diciembre.
Puede que el virus sea menos letal, pero los expertos auguran que su alta contagiosidad generará miles de infectados entre los que puede haber más casos que terminen internados.
Un estudio de laboratorio mostró que Ómicron infecta y se multiplica 70 veces más rápido que Delta en los bronquios, pero se replica diez veces más lento en pulmones, donde puede generar más daño. Esta puede ser la primera evidencia biológica de por qué es más contagiosa pero sería menos letal.
Síntomas de Ómicron
Debat y Torres aseguran que aún no hay datos certeros sobre la asociación de Ómicron con un cuadro clínico diferencial al de otras variantes de preocupación.
El análisis de un brote EE.UU. indicó que los síntomas más comunes fueron tos, fatiga y rinitis. En tanto, más del 70 por ciento de los casos de un brote en Noruega informaron tos, letargo, dolor de cabeza y de garganta y más de la mitad informaron fiebre.
Medidas para frenar Ómicron
Las medidas para frenar a Ómicron son las mismas que se vienen recomendando desde el inicio de la pandemia:
-Minimizar los encuentros sociales, en especial los más masivos, con gente desconocida y donde puede haber un relajamiento de las medidas de prevención.
-Completar los esquemas de vacunación, inclusive con la tercera dosis. También es clave vacunar a los niños porque la capacidad provocar contagios dentro del hogar es muy alto con Ómicron.
-Usar barbijo de calidad y bien ajustado todo el tiempo que están en contacto con otras personas.
-Fomentar las reuniones al aire libre. Si no es posible, los ambientes cerrados deben estar bien ventilados.
-Testearse el día previo a una reunión social y pasados cuatro días desde el encuentro durante los cuales la recomendación es aislarse y, al menos reducir el contacto con personas de riesgo (adultos mayores, inmunosuprimidos, pacientes con diabetes, hipertensión, obesidad, etcétera). Fuente: (La Voz)