El Subsecretario de Servicios Públicos de la comuna, Lucas Feltes, habló sobre el estado del servicio de agua potable, luego de los trabajos que comenzaron el pasado viernes con la colocación de las válvulas inteligentes y los inconvenientes que surgieron con el transcurso de las horas.
Vale recordar que pese al comienzo del proceso de potabilización y que gran parte de la ciudadanía recuperó el suministro de agua, muchos barrios siguieron sin el servicio o con poca presión.
“La prestación se pudo normalizar casi por completo el fin de semana pero hoy a las 4 de la mañana los operadores del centro distribuidor Ejército nos comunicaron que había habido un problema eléctrico que fue resuelto a la media hora”, explicó Feltes en diálogo con Elonce y acotó: “Seguramente el sector oeste tiene que haber sentido una baja de presión o faltante, pero fue media hora y ya se volvió a normalizar. No fue tanto el tiempo del inconveniente, así que seguramente ya está normalizado”.
Consultado sobre los motivos por el cual algunos sectores de la ciudad vieron normalizado el servicio antes que otros, el funcionario mencionó que “las zonas más altas de la ciudad fueron en las que más demoró la recuperación, teníamos previsto un corte de 18 horas como máximo y se extendió hasta casi 48 horas por lo cual el llenado de los tanques, en algunos lugares demoró”.
Tras ello, remarcó que “el trabajo de la colocación de las válvulas en sí fue dentro de lo programado, cerca de las 21 horas del viernes volvimos a producir agua pero dos horas después se produjo una rotura en calle Rondeau y El Dorado que es un lugar complicado para trabajar con las máquinas y esa reparación requiere de mucho tiempo”.
Por otra parte, Feltes dijo que entienden que la falta de servicio genera malestar en la ciudadanía, y dio cuenta que “por ahí es difícil explicarle a la gente lo que realmente implica en avance esto que estamos colocando. Hoy sabemos cuánta agua llega a los centros distribuidores pero no tenemos un panorama de cómo va circulando el agua en la ciudad; si ya tuviéramos en funcionamiento estas válvulas que se están colocando, podría decir al instante en tal lugar ya llegó el agua o en aquel va poco caudal. Pero no tenemos esos datos como los tiene cualquier prestadora de agua en cualquier lugar del país y del mundo, por eso es importante tener esta tecnología”.
“El humor de la gente tiene un costo social y político porque cuando uno corta el agua la gente se enoja pero son decisiones que hay que tomar y obras que hay que hacer y cuando surge un imprevisto se retrasan más las situaciones pero hubo más de 100 trabajadores todo el fin de semana y no se dejó de trabajar para recuperar el servicio”, dijo finalmente Feltes. Elonce.com