REDACCIÓN ELONCE
Una nueva ablación pediátrica se concretó este miércoles a la madrugada en el hospital materno infantil San Roque de Paraná. Para el traslado de los médicos y los órganos ablacionados, fue clave el rol de Bomberos Voluntarios de la ciudad, quienes asisten en el transporte de las oportunidades de vida para los pacientes en listas de espera por un trasplante.
“Hace años trabajamos con Cucaier. A penas inicia el operativo, se nos informa el cronograma de vuelos en los que viajan los médicos porque bomberos prestamos colaboración para el traslado desde el aeropuerto hasta el nosocomio donde se hará la ablación. Un par de horas después, llevamos a los médicos y los órganos ablacionados de regreso al aeropuerto”, explicó a Elonce el cabo Pablo Aquino.
Y continuó: “Cuando se los da aviso del operativo, los choferes nos presentamos en el cuartel, hacemos el alistamiento del móvil -desde el combustible hasta la limpieza- y se nos informa a qué hora llegaría el vuelo al aeropuerto de Paraná para esperar a los médicos en el lugar”.
En la oportunidad, el bombero voluntario comentó que los operativos de ablación, habitualmente, son en horas de la noche y el protocolo indica que deben viajar escoltados por un móvil policial, con balizas y sirenas, y a una velocidad máxima de 60km/h. Mientras que, durante el día, presta colaboración la División Motorizada del Cuerpo Único de Inspectores de Tránsito de la Municipalidad de Paraná “porque el tránsito es más fluido en esos horarios”.
De acuerdo a lo que comentó, “es muy amable el diálogo” con los profesionales médicos y el personal de Cucaier que diagrama los operativos de ablación. “Siempre consultamos el tiempo estimado de cirugía para estar atentos, mas allá de que cuando están terminando, personal de Cucaier informa a nuestro jefe para que salgamos a esperarlos; así, cuando salgan a la puerta del nosocomio, suben a la camioneta y salimos enseguida”, repasó Aquino.
“El trabajo de bomberos es voluntario”
“El trabajo de bomberos es voluntario, por lo cual, uno tiene que amar la tarea que realiza”, sentenció Aquino. De hecho, explicó que, durante un operativo de ablación, “no se afecta la guardia activa” del cuartel de Bomberos Voluntarios. “Los choferes, por fuera de turno, somos los que trabajamos entre cuatro o cinco horas prestando servicio en un día franco. Siempre damos un poco más por la comunidad, tratando de salvar vidas y bienes”, sentenció el voluntario.