Maju Lozano contó públicamente hace poco más de un año que le diagnosticaron autismo. Ahora, la conductora volvió a hablar de este trastorno y se refirió a las críticas que recibió en este último tiempo.
“Hubo gente que me dio con un hacha”, expuso la periodista en la nota que dio para el ciclo radial Agarrate Catalina, de Catalina Dlugi, en La Once Diez.
Preguntas inesperadas
“Me han llegado a preguntar productores muy importantes, ¿pero podés seguir trabajando’”, ventiló Maju sobre las consultas que le hicieron tras contar su diagnóstico. “Fue uno de mis miedos en ese momento”, aseguró sobre su vida laboral.
Sin embargo, destacó: “Hay un tema, no de ignorancia porque uno es ignorante en un montón de cosas, pero sí es importante el respeto, la empatía... Sino existe Google al menos para sacarse las dudas”.
“Bastante desactualizados”
De esa manera, la conductora de Cocineros argentinos (América) aseguró que hay muy poca información sobre el autismo. “Me escriben mucho y voy contestando y acompañando como puedo porque es un proceso largo y también doloroso”, expresó.
“A mí me sorprendió tanto cuando hace tres años me enteré de que existía el diagnóstico tardío y que en adultos existía también. En Argentina lamentablemente estamos bastante desactualizados y hay mucho prejuicio”, manifestó Maju.
“Cuando me empecé a enterar, mi búsqueda cambió por completo, y me pareció importante contarlo o hacerlo público y nada más que eso”, dijo Lozano. Y sobre su situación, reconoció: “Me pareció que era importante decirlo”.
Qué dijo Maju Lozano cuando contó su diagnóstico de autismo
En julio del año pasado, la periodista se había despedido de Todas las tardes y contó que los 51 años le habían diagnosticado autismo
Después de asegurar que no quería llorar “porque no era algo triste”, explicó lo que sintió tras los resultados de los estudios que se hizo: “El 5 de mayo es el día de mi nuevo cumpleaños, como me dijo mi terapeuta. Sentí un gran alivio porque para mí solo fue felicidad poder comprender que todo esto que venía sintiendo tenía una explicación”.
“Fui diagnosticada de autista. Soy autista. Para mí es volver a nacer, reconstruir 51 años de dudas, de buscar explicaciones donde no las había. No quiero explicar el autismo, es algo que todavía estoy aprendiendo. Me parece que lo más importante es que ya no estoy más rota, porque siempre me sentí una persona rota”, concluyó.
En cuanto a cómo reaccionó ante el trastorno, agregó: “Para mí esto trajo un alivio muy grande a mi vida, porque por fin sentí que pertenezco a un lugar. Esto de la identidad y la pertenencia es algo por lo que siempre hemos luchado en este programa desde el día uno”.