No hay tiempo para lamentos ni reproches. Lo que viene es lo único que interesa. El resto ya es pasado. Es cierto, Sionista desperdició una inmejorable oportunidad como para ponerse al frente en el mano a mano con Lanús y quedar a una sola victoria de la Permanencia, a sabiendas que debía volver a jugar en casa. Falló, perdió de local y no solo quedó abajo en la llave, sino además muy comprometido en su objetivo de ganar la serie y mantenerse en Primera.
Ahora bien, los playoffs son un sistema de juego que concluye cuando ya no hay más chances de revertir el panorama, y a decir verdad, Sionista aún respira y tiene posibilidades. La situación no es favorable, por el contrario, es muy complicada, no obstante, hay margen como para cambiar el rumbo y lograr su cometido.
Para ello, el Centro Juventud deberá salir airoso esta noche y después ganar el quinto y último encuentro de visitante, caso contrario, perderá la categoría.
Por lo pronto, el duelo Sionista-Lanús está 2 a 1 para los de Fabio Demti. Esta noche se vuelven a encontrar en el cuarto partido, programado para las 21.30 con el arbitraje de Alejandro Chiti, Roberto Smith y Fabio Alaniz, señala <i>Paraná Deportes.
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Desde ya que está todo más que claro. Sionista esta noche debe ganar para seguir con vida y Lanús para cerrar la llave a su favor y salvarse del descenso. Los dos se juegan mucho en una definición caliente, de muchas ansiedades, nervios y tensiones.
La incógnita pasa por sabe cómo reaccionará Sionista a lo que fue un golpe fuerte. Después de ganar de visitante en el segundo partido había mucha ilusión de poder cerrar esta temporada en casa, con los dos triunfos que significarían la salvación. Sin embargo, Lanús se plantó mejor, ganó en el estadio "Moisés Flesler" y ahora quedó bien parado para lo que viene.
Si bien la gran responsabilidad ahora la tiene el conjunto que dirige Miguel Volcan Sánchez, también sabe que si gana esta noche servirá para estimular sus intenciones y viajar a Buenos Aires con entusiasmo.
Ahora bien, para lograrlo deberá controlar a Green, el hombre clave del adversario. También marcar muy bien a Juan Cantero, base que maneja los tiempos y hace jugar al resto. Lanús tiene otras virtudes, pero esencialmente se nutre de Cantero y Grenn.
