Las sensaciones de Lionel Messi luego de la caída de Argentina por 1 a 0 ante Alemania resultan difíciles de explicar con palabras. Su rostro, visiblemente compungido por el subcampeonato en la Copa del Mundo de Brasil, llevará unos cuantos días de digestión. Una vez concluido el partido, en los pasillos del Maracaná, el mejor jugador argentino no encontró consuelo: "Sin dudas es el dolor más grande de mi carrera. Queríamos ganar por la gente y por nosotros, lo merecíamos después de todo lo que pasamos".
Para explicar el triunfo de los alemanes en Río de Janeiro, mediante el gol convertido por Mario Gotze a los 7' del segundo tiempo suplementario, la "Pulga" indicó que "veníamos de muchos años sin pasar los Cuartos y le jugamos de igual a igual a una gran Selección, pero merecimos algo más. No tuvimos la suerte de otros partidos, los de arriba no supimos definir, tuvimos ocasiones todos para marcar". De esta manera, el rosarino se marchó del certamen con 4 tantos, todos en la primera fase del campeonato.
"Es un golpe muy duro por cómo se dio, queríamos llevar la Copa a Argentina, pero nos vamos con la frente en alto", añadió el capitán, que tuvo una opción inmejorable para abrir el resultado en el segundo período de juego, pero abrió demasiado su remate, que salió cerca del palo. "En lo personal viví muchas tristezas con la Selección, hubo un cambio grande en este tiempo, pero no se dio hoy y hay que mirar hacia adelante", siguió.
Por otro lado, Messi aseguró que "tenemos que disfrutar lo que hicimos como lo disfruta la gente y ya tendremos más suerte", pero también aclaró que su estado físico nunca sufrió contratiempos anormales, como se llegó a mencionar en algún momento. "Yo estaba bien, igual que todos los demás. Hubo partidos con mucho desgaste, sobre todo el último, ellos tuvieron un día más de descanso y no jugaron prórroga. Un día más, a esta altura del certamen, es mucho decir", amplió su pensamiento.
A su vez, consultado por la designación como mejor futbolista del Mundial, que le valió la obtención del Balón de Oro, el delantero del Barcelona dijo que "significa muy poco para mí, en estos momentos no me interesa nada, sólo quería levantar la Copa y llevarla para Argentina". Del mismo modo, interrogado sobre lo que viene con la Selección, indicó que "falta mucho para Rusia 2018, ahora estamos dolidos por lo que pasó y no pensamos en nada más".
"Ya está, miro para adelante, pienso en las vacaciones y después en nuestros equipos, que es lo que viene", continuó Messi, aunque no se iba a guardar su opinión sobre la situación de Alejandro Sabella, cuyo representante dio a entender que se apartará del cargo en los próximos días. "Ojalá quiera continuar, pero será su decisión. A mí me gustaría que siguiera porque le dio mucho a la Selección", culminó.
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