El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) resolvió la sanción para River por la suspensión de la final de vuelta ante Boca por la Copa Libertadores del 2018: no se modificará el resultado deportivo, pero sí deberá jugar sin público dos partidos como local en la edición del certamen de este año.
A esto, se le suma que el Millonario ya debía cumplir una fecha por parte de Conmebol, por la utilización de pirotecnia en el duelo ante el Xeneize, por la semifinal de ida en el 2019, en condición de local.
Ahora, deberá determinarse si estas sanciones se acumulan. De ser así, River afrontará toda la fase de grupos jugando a puertas cerradas en el Monumental, para recibir a Binacional (Perú), San Pablo (Brasil) y Liga de Quito (Ecuador), lo que representaría una gran pérdida económica para las arcas del club.
En Copa Libertadores, la institución recauda, aproximadamente, 100 millones de pesos por partido de zona de grupos, teniendo en cuenta que hasta los abonados pagan un plus adicional. Si finalmente la sanción es de tres partidos, el club se perdería de recaudar 300 millones de pesos en la primera fase. En dólares (con el cambio a 63), sería una cifra cercana a los US$ 4.761.904.
De esta manera, el Millonario, que no salió al mercado de pases priorizando las arcas, sumaría un problema económico más para afrontar este 2020. Igual, la comisión directiva encabezada por Rodolfo D'Onofrio apelará ante Conmebol para evitar la sanción y sólo cumplir la del TAS, y jugar sólo dos partidos a puertas cerradas.