Miroslav Klose, máximo goleador en la historia de los Mundiales y de la selección alemana de fútbol, anunció hoy el fin de su carrera como internacional casi un mes después de ganar la Copa del Mundo en Brasil 2014.
El hoy delantero de Lazio de Italia, de 36 años, cerró así un ciclo glorioso con un récord de 71 goles en 137 partidos con la camiseta alemana. En Brasil marcó además dos tantos que lo hicieron transformarse en el máximo anotador de los Mundiales al sumar 16 tantos, uno más que el brasileño Ronaldo.
"Con el título en Brasil cumplí un sueño de niño", dijo en un comunicado difundido hoy por la Federación Alemana de Fútbol (DFB). "Estoy orgulloso y feliz de haber sido parte de este éxito del fútbol alemán. Dediqué las últimas semanas a revivir y disfrutar esos momentos. No hay mejor momento para cerrar el capítulo de la selección nacional", agregó.
Klose había dejado abierto su futuro la misma noche de la final que Alemania ganó 1-0 a Argentina hace un mes en Río de Janeiro. Hoy se convirtió en la segunda estrella de los campeones del mundo que cerró su carrera en la selección después del capitán Philipp Lahm.
Un poco de su historia. Nacido en 1978 en la Polonia comunista como hijo de un futbolista profesional y de una jugadora de balonmano de la selección, Klose vivió con su familia unos años en Francia antes de trasladarse a los ocho años a Alemania. Nunca quiso perder su patria de origen: con su mujer y sus hijos gemelos sigue hablando polaco.
En 2000 debutó en la Bundesliga alemana con Kaiserslautern y un año más tarde fue convocado a la selección. Ingresó por primera vez en el minuto 73 de un partido ante Albania por la clasificación al Mundial 2002 y antes del final marcó su primer gol como internacional.
Desde entonces su acrobático salto mortal para celebrar cada gol se repitió a ritmo de récord con la selección y con Werder Bremen, Bayern Múnich y desde 2011, con Lazio de Italia.