Una red de apuestas ilegales que operaba en Ciudad y Provincia de Buenos Aires fue desarticulada tras una serie de 30 allanamientos realizados por la Justicia. El operativo no solo expuso una estructura de lavado de dinero y detuvo a tres integrantes de la banda, sino que también dejó a varios famosos e influencers bajo investigación.
Entre ellos, están Florencia Peña y Marito Laurens, conocido en TikTok como “Tu Carnicero de Confianza”, quienes ya fueron notificados y citados a declarar en la causa, acusados de promocionar estas plataformas clandestinas en sus redes sociales. Fuentes judiciales informaron que el resto de los influences todavía no fueron avisados y recibirán el documento en las próximas horas.
La investigación comenzó en mayo, a raíz de denuncias presentadas por Lotería de la Ciudad y la Cámara Argentina de Salas de Casinos y Bingos. También tuvo un papel clave el ciberpatrullaje de la Policía Federal Argentina, que durante cinco meses identificó a los usuarios que fomentaban los juegos ilegales en línea.
En el megaoperativo, que incluyó más de 30 allanamientos en distintos puntos de la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires, la Policía Federal, la Policía de la Ciudad y la Bonaerense secuestraron bienes por un valor millonario.
En Capital Federal, incautaron más de 3 millones y medio de pesos y 5200 dólares, mientras que en la provincia de Buenos Aires las cifras fueron aún más abultadas: 267 millones de pesos y 7500 dólares en criptomonedas, que ahora están bajo control de una billetera virtual de la fiscalía. Además, se encontraron armas: 7 pistolas y unas 300 municiones de distintos calibres.
La líder de la organización fue identificada como Mariela Andrea Cervetto, propietaria de una cueva financiera en la que se lavaba el dinero recaudado a través de estas plataformas de apuestas clandestinas.
Cervetto fue arrestada en una casa en un costoso country de la zona de Pinamar. Está registrada como empresaria en la AFIP, empleada de una firma con oficinas en la calle Corrientes, dedicada, al menos en los papeles, al negocio inmobiliario.
La mujer integra desde 2007 los directorios de diversas firmas de microcrédito y publicidad. Lleva una vida de lujos, que muestra constantemente en sus redes sociales, mayormente en TikTok, donde sube fotos en playas y piletas. Pero la Justicia sospecha que todo el dinero que recaudó en este tiempo lo hizo a través del sitio web GanamosNet y miles de variantes que surgen de esa página de apuestas.
La empresaria fue detenida junto a otros tres integrantes del grupo: Gonzalo Joaquín Mansilla, quien se ocupaba de la venta y comercialización de los casinos virtuales; e Iago Charon, un programador encargado de montar las estructuras técnicas para que las plataformas funcionaran. Además, hay un prófugo con pedido de captura, Lautaro Martín Granda, quien ya fue identificado, pero se encuentra fuera del país.
El modus operandi de la organización era sofisticado. Los programadores diseñaban plataformas de apuestas “llave en mano”, es decir, sistemas completos que ofrecían todo el hardware y software necesario para que los operadores gestionaran los casinos online de manera autónoma. Este tipo de servicios incluía el diseño, operatividad, desarrollo e implementación de las aplicaciones, todo pensado para que la actividad ilegal pasara desapercibida.
Entre los bloqueos derivados del operativo, se cerraron más de 2000 sitios web de apuestas clandestinas. En paralelo, 14 famosos e influencers están siendo investigados por “promoción y captación de apostadores”, dado que habrían publicitado estas plataformas en redes sociales y otros medios digitales, incentivando a sus seguidores a participar en estos juegos ilegales.
”Este es un avance importante en la lucha contra el juego ilegal”, destacó el fiscal general de la Ciudad, Juan Bautista Mahiques, quien agradeció el trabajo conjunto de todas las fuerzas de seguridad. Por su parte, el jefe de gobierno porteño, Jorge Macri, remarcó que esta operación también es un paso en la lucha contra la ludopatía infantil, una problemática que describió como “una nueva pandemia silenciosa”.
La causa quedó en manos de la Fiscalía Penal Especializada en Juegos de Azar, dirigida por Juan Rozas, y de la Unidad Fiscal Especializada en Cibercrimen de San Isidro, a cargo de Alejandro Musso.