El secretario de Educación, Carlos Torrendell, volvió a manifestar su desacuerdo con la marcha universitaria programada para este miércoles, calificándola como una protesta "antigobierno". Según el funcionario, las consignas de la movilización se centran exclusivamente en el tema de los salarios.
Torrendell argumentó que es necesario realizar un "gasto inteligente", que priorice los recursos para quienes más lo necesitan y que se base en un criterio de libertad. Destacó que los datos de funcionamiento de las universidades incluyen no solo la inflación de este año, sino también la del año anterior, ya que los recursos estuvieron congelados desde octubre de 2022, salvo algunos refuerzos parciales en 2023.
El secretario aseguró que "los salarios se están recomponiendo" y que el Gobierno está dispuesto a revisar el presupuesto para 2025 en el área educativa. "El Presidente fue claro: las asignaciones presupuestarias deben contar con los fondos necesarios para su sostenimiento. El Congreso puede ampliar el presupuesto para universidades, pero deberá determinar de dónde obtener esos recursos", afirmó.
El subsecretario de Políticas Universitarias, Alejandro Álvarez, también coincidió en que se trata de una "marcha opositora" y criticó al vicerrector de la Universidad de Buenos Aires (UBA), Emiliano Yacobitti, quien había mencionado la formación de un nuevo frente político.
Álvarez añadió que no ha recibido solicitudes, ni formales ni informales, de ninguna universidad pidiendo una ampliación del gasto de funcionamiento, ni para el presente ni para el presupuesto de 2025. En cuanto a los salarios, destacó la necesidad de acordar un "cargo testigo" para determinar el sueldo promedio de los docentes universitarios. También enfatizó que los rectores son los empleadores y responsables de la administración de los fondos que se les asignan.