Esta semana, uno de los temas que conmocionó al país fue el estado de salud de Silvina Luna, quien se encuentra en terapia intensiva en el Hospital Italiano por una complicación en sus pulmones debido a una bacteria, motivo que a su vez habría agravado su cuadro renal. En este contexto, la periodista Connie Ansaldi se refirió al calvario que vive la modelo y apuntó contra Aníbal Lotocki, el cirujano que la operó en el 2010, en una cirugía estética de la cual nacieron sus problemas de salud. También dejó una profunda reflexión en su cuenta de Instagram.
“Silvina en terapia intensiva. Lotocki libre y atendiendo. Un país sin garantías para sus ciudadanos y sin Justicia no es un país. Es un proyecto”, manifestó y luego agregó: “Necesito que se junten todos los abogados, que además tienen los recursos de visibilizar causas, y hagan algo con eso”.
Al enterarse de que el cirujano iba a dar una nota exclusiva a Telenoche, la comunicadora expresó: “No quiero que le den espacio en la tele a Lotocki. No lo dejen seguir mintiendo y justificándose. No todo vale en nombre del rating. Es una vergüenza. Mínimo tendría que estar inhabilitado para ejercer la medicina. Mínimo. Se metió el juramento hipocrático en el bolsillo”, sentenció.
En otro tuit, Ansaldi continuó con su descargo. “Hace años que se habla de lo trucho que es Lotocki. De los problemas que tienen sus pacientes, etc. Y el tipo lo más pancho. Debe tener alguien groso que lo banca, si no posta que no se explica”.
Pero también tuvo espacio para hablar de Mónica Farro, quien aseguró que tuvo una “buena experiencia” con el cirujano en cuestión. “Farro dice ‘hay gente que quedó horrible’. No se trata de horrible o lindo. Es la salud lo que se juega, no lo estético”.
Al final de esta jornada, en la que se conocieron más detalles del duro momento que vive Silvina Luna, Connie Ansaldi aprovechó sus redes sociales para escribir una profunda reflexión sobre la autoestima y el cuerpo.
La publicación de Connie Ansaldi en Instagram
“Hoy quiero que te abraces como me estoy abrazando yo. Por todas las veces que nos cambiamos de ropa pensando que todo nos quedaba mal. Por los días en que evitamos los espejos sintiéndonos feas. Por las noches en que preferimos quedarnos en casa creyendo que no íbamos a gustarle a nadie. Por odiar nuestro cuerpo y desear tener otro. Por los incesantes, ‘gorda, gorda, gorda’. Por decir en voz alta que no nos gusta nuestro pelo, nuestras piernas, nuestra panza, nuestros brazos, nuestra cara. Por las veces que preferimos pasar hambre antes que disfrutar una comida. Por preferir no ir a la pileta para no ponernos el traje de baño. Por desear ponernos tetas para después sacárnoslas mientras limamos el hueso de nuestra nariz. Por observar con pánico como el tiempo avanza y ya no somos tan jóvenes. Por todas las veces que no nos sentimos suficiente para uno ni para los demás”, manifiesta la publicación.
Por último, Connie Ansaldi escribió: “Abrázate para decirte que sí: lo sos. Y que no hace falta que hagas absolutamente nada para ser más hermosa de lo que sos. Ahora, en este instante, que estás acá, viva. Abrázate ahora. Deja lo que estás haciendo y abrazate fuerte. Te estoy abrazando también yo, mientras me abrazo a mí misma”.