La variante delta de Covid-19, identificada por primera vez en la India, se ha detectado en 74 países y continúa propagándose rápidamente en medio de temores de que pueda convertirse en la cepa dominante en todo el mundo. Su avance obligó a Gran Bretaña a retroceder en la reapertura total de sus actividades.
Brotes de esta variante en China, África, Estados Unidos, Escandinavia y el Pacífico se han confirmado y expertos señalan que esta podría ser más infecciosa que las otras variantes ya conocidas del Covid-19.
En Gran Bretaña, el país europeo más afectado por la pandemia, más de la mitad de las cepas del SARS-CoV-2 que están circulando en la población son delta, y se investiga si esa variante está asociada con una mayor capacidad de causar reinfecciones y de enfermar más gravemente, además de poder evadir el sistema inmunológico, como también lo señaló la Organización Mundial de la Salud (OMS) en su última actualización epidemiológica, de acuerdo con la evidencia científica disponible.
Entre 40% y 80% más contagiosa que la alfa, es ahora responsable del 96% de los nuevos casos en Gran Bretaña, con casi 128.000 muertos. Y ha llevado los contagios diarios de 2000 a 7000 en poco tiempo.
En Francia también crece el alerta por el alcance de esta variante. La Agencia Regional de Salud de la región francesa del Gran Este anunció en las últimas horas un “plan de acción inmediato” tras haber identificado cuatro casos en Estraburgo.
Preocupación en Estados Unidos
Scott Gottlieb, un excomisionado de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés), ha señalado que esta variante parece ser “más peligrosa” que otras y que los casos en ese país se duplican cada dos semanas aproximadamente. En Estados Unidos, el 6% de los casos actuales corresponden a esta variante.
En una entrevista con CNBC, Gottlieb señaló que consideraba que suficientes personas ya habían sido vacunadas como para retrasar el riesgo que representa esta nueva variante.
“La pregunta es: ¿hay suficientes personas no vacunadas como para que la variante pueda ingresar a la población y comenzar a extenderse ampliamente? Creo que es poco probable que sea una amenaza hasta el otoño, tal vez“, dijo el excomisionado de la FDA.
Freno en Gran Bretaña
El primer ministro británico, Boris Johnson, pospuso hoy por cuatro semanas el levantamiento de las últimas restricciones contra el coronavirus en Inglaterra, con la esperanza de frenar el rápido auge de la variante delta completando su exitosa campaña de vacunación.
”Creo que es sensato esperar un poco más”, afirmó en rueda de prensa, al anunciar la “muy difícil decisión” de aplazar el desconfinamiento total del 21 de junio al 19 de julio.
De acuerdo con Reuters, la situación de emergencia será revisada el 28 de junio, lo que podría permitir adelantar la reapertura, aunque un vocero del primer ministro dijo que era poco probable que hubiese un cambio de decisión.
Enfrentado a una mutación mucho más contagiosa del coronavirus, detectada en Kent, al sur de Inglaterra a fines del año pasado e identificada después como alfa por la OMS, su gobierno impuso un estricto confinamiento a principios de enero que empezó a levantar muy gradualmente a finales de marzo. Poco a poco fueron reabriendo escuelas, comercios no esenciales, terrazas, cines, museos y restaurantes, devolviendo a los británicos parte de su libertad. Solo faltaba permitir la reapertura de discotecas y otros locales de ocio nocturno en su máxima capacidad.
Johnson sostiene que retrasar el desconfinamiento total permitirá completar las vacunas de más británicos, especialmente después de que un estudio de las autoridades sanitarias de Inglaterra arrojara este lunes que haber recibido dos dosis de las vacunas Pfizer-BioNTech o AstraZeneca protege en 96% y 92% respectivamente de una hospitalización a raíz de la variante delta.
Crece la preocupación
Fue en abril cuando la OMS designó a delta como variante “de interés” y posteriormente el 11 mayo cambió a variante “de preocupación”, según reseña el diario The Guardian.
Según la evidencia observada en la India, podría causar síntomas más graves que incluyen dolor de estómago, náuseas, vómitos, pérdida de apetito y de audición y dolor en las articulaciones.
De acuerdo con un estudio publicado en la revista científica The Lancet, la variante delta duplica el riesgo de hospitalización en comparación con la variante alfa. Sin embargo, el estudio también señala dos dosis de vacuna brindarían una fuerte protección.
Pese a que la OMS y varios países insisten en la vacunación como estrategia para frenar la propagación de esta variante, The Guardian reseña que en China la cepa también parece ser más resistente a las vacunas, en particular a las que una sola aplicación.
El avance de la cepa en distintos países ha renovado la discusión acerca de cómo los gobiernos deberían responder a la variante delta. En medio de las dificultades para prevenir su propagación a nivel mundial, diferentes países estudian diferentes enfoques para tratar de controlar su propagación.