"Es preocupante el repunte de casos, nos saca de la tendencia donde veníamos reduciendo la cantidad, ya que en diciembre hemos tenido un aumento semanal. Esta situación no está estresando en demasía el sistema de salud pero pone una luz de alerta", dijo a Télam el infectólogo Pablo Scapellato.
En la misma línea opinó la infectóloga Leda Guzzi, según quien "es muy preocupante porque no lo esperábamos tan pronto, pensábamos que iba a suceder en febrero o marzo y se está adelantando, son muchos casos".
"Antes teníamos muchos casos pero la gente mantenía ciertas medidas de cuidado, ahora estamos viendo que los casos aumentan de forma incesante y están generando tensión sobre el sistema de salud, que por ahora tiene capacidad de respuesta, pero que es finito. Hoy en día la gente está totalmente desbocada en la calle, sin cuidarse", alertó.
Según informó el último Boletín Epidemiológico del 14 de diciembre pasado, a nivel nacional la mediana de edad de los casos confirmados es de 38 años, donde el grupo etario entre 30 a 39 años registró la mayor cantidad de casos confirmados y la tasa específica por edad más elevada.
La secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, dijo hoy, durante el reporte nacional, que en la distribución de casos de coronavirus por edad el 43,3% se da entre los 20 y 39 años y el 10% entre 0 y 19.
En tanto, el promedio de edad de los casos confirmados fallecidos es de 74 años y se destaca que el 83% de los muertos tenía 60 años o más.
"Hay un comportamiento social que ha cedido en el cuidado en general. Luego, es verdad que jóvenes y adolescentes son los que generalmente viven situaciones de mayor riesgo como encuentros sociales o reuniones donde no se mantiene la distancia social y no se usa barbijo", agregó Guzzi.
"El consumo de alcohol o de drogas recreativas facilita que ciertas medidas de cuidado se pierdan. No es un mensaje moralizante, pero es verdad que se relaja o se desinhibe y hace perder la percepción del riesgo", expresó.
Guzzi aseguró que "es muy importante trabajar la solidaridad trasgeneracional".
"Que los jóvenes entiendan que, aunque ellos no se enfermen gravemente o se mueran por Covid, vuelven a su casa y tienen contacto con su familia y ahí los padres, abuelos, tíos o el entorno laboral sí se pueden enfermar gravemente, saturar el sistema de salud o fallecer", remarcó.
Por su parte, Scapellato señalo que "es imposible señalar una causa en particular, es una enfermedad que en su propagación depende de muchos determinantes".
"Se evita si ponemos en juego medidas que claramente mostraron ser eficaces como el uso del tapabocas, el distanciamiento social, lavado de las manos o si no circulamos. Si la enfermedad está resurgiendo es porque alguna de estas cosas las estamos haciendo de un modo despreocupado", aclaró.
El infectólogo advirtió que el repunte de casos se puede explicar "por la cantidad de gente que se juntó en encuentros masivos que van desde necesidades sociales, reclamos políticos, fiestas clandestinas o los amontonamientos para comprar".
"Con las cosas como están no queda más que apelar a la conciencia individual, en función de un beneficio social. Tenemos que tener una conciencia solidaria, cuidarnos a nosotros y cuidar al otro. Si no hay mejoría, los que toman decisiones en política sanitaria van a apelar otro tipo de medidas que hagan que nos juntemos menos y nos distanciemos más", alertó. (Télam)