La Asociación de Médicos de la República Argentina (Amra) respaldó la decisión que evalúan las autoridades locales de volver a una cuarentena estricta por 15 días para aliviar al sistema de salud. La secretaria general del gremio en Rosario, Sandra Maiorana, advirtió que si no se toma una orden de ese tipo "habrá enfermos que van a morir sin recibir atención".
El sindicato avaló las declaraciones que le hizo a La Capital el secretario de Salud municipal, Leonardo Caruana, quien advirtió que si el sistema sigue al límite "será necesaria una cuarentena más estricta". Eso significa mayores restricciones por 15 días, ya que la capacidad de atención continúa saturada.
Rosario registró ayer 812 nuevos contagios de coronavirus y hasta este lunes hubo 443 casos fatales. En tanto, en la provincia el Ministerio de Salud reportó 1.989 nuevos casos y una persona fallecida ayer.
En declaraciones al programa "Todos en La Ocho", Maiorana se mostró "totalmente" de acuerdo con los dichos de Caruana. "Hay que retroceder de fase y restringir actividades, porque vamos a ver lo que se vio en otros países con pacientes en las calles porque no hay dónde ponerlos", enfatizó.
"Caruana tiene una función pública en la cual debe mantener la calma en la sociedad. Yo no tengo esa función. Si esto sigue así, va a morir gente sin atención, porque los números de contagios siguen en aumento y no alcanza el personal de salud para atenderlos", remarcó la dirigente de Amra.
Personal de salud en el operativo en la exRural.
La titular del gremio que agrupa a los médicos subrayó que "el sector de la medicina privada está lleno y cederá una parte mínima mientras que pueda", y agregó: "Cuando tenga que ocupar sus camas con pacientes de ellos, no las va a ceder. Estamos complicadisimos y muy mal. El nivel de contagios es demasiado alto y tenemos muchos casos graves, porque está la mayor parte de la población infectada".
Maiorana remarcó que un importante número del personal de salud está internado y no van a volver a trabajar. Y los que se recuperan, no están tan bien de salud. Están muy cansados y no están en condiciones de trabajar. Cada vez queda menos personal de salud para atender a la población que cada día se enferma más".
"El riesgo en el que estamos es grandísimo. La población tiene que tomar conciencia. Entiendo el cansancio y comprendo al que tiene que salir a trabajar porque tiene que comer. A nadie le gusta estar encerrado, pero la libertad de uno termina donde empieza la del otro. Hay gran parte de la ciudadanía se está cuidando porque no quiere enfermarse y todos los que salen irresponsablemente ponen en riesgo a esa población", finalizó.