Hernán Rivero es un camionero que vive en la localidad de Pozo Hondo, en Santiago del Estero. Duerme en la ciudad cordobesa de Jesús María. En un estado de desesperación, denuncia que hace tres meses no puede volver a su casa con su familia por las restricciones por el coronavirus, pese a tener todos los permisos. Reclama que fue papá y no pudo conocer a su hijo.
"No respetan el decreto con los trabajadores esenciales, yo llevo combustible. Llamé y mandé mensajes a la Municipalidad y no tengo respuesta del intendente, Jorge Bustos, ni de nadie", lamentó en diálogo con <i>Cadena 3</i>.
El chofer relató que lo obligan a aislarse por 14 días en una habitación con una cama en un lugar destinado a eso, pero afirmó que no puede perder ese tiempo de trabajo porque tiene que alimentar a su familia.
"Explico que soy esencial, que tengo test negativos. Nos hacen testeos en los ingresos a Córdoba tres veces por semana. Fui papá el 7 de agosto y todavía no pude conocer a mi hijo", subrayó.
La empresa para la que trabaja le da alojamiento en la infraestructura que tiene en Jesús María. En los días de franco, contó que se la pasa entre camiones. "Estoy en un pozo depresivo", dijo.
Cansado por la situación, indicó que se mudará a la localidad cordobesa de San José de la Dormida. Ya tiene todo organizado para la mudanza, con permisos, pero no lo dejan entrar a Pozo Hondo, según agregó.
"Había comprado un lote para hacer mi casita y lo tuve que poner en venta para hacer la mudanza. Quiero disfrutar la vida, de mi familia, mi mujer, mis hijos", cerró.