Con 156 nuevos casos de coronavirus en la provincia de Santa Fe, de los cuales 59 corresponden a Rosario, la directora de Epidemiología, Carolina Cudós, hizo hincapié en la proliferación de contagios que si bien afectaban fundamentalmente al sur de Santa Fe, se comenzaron a expandir hacia el centro-norte santafesino. El caso emblemático fue registrado en Margarita, donde un infectado que había viajado a Buenos Aires, pese a estar en aislamiento, rompió la restricción, se fue a comer un asado con amigos y ya contagió al menos a uno.
En total se registraron hasta anoche en toda la provincia 2.431 casos, de los cuales 24 permanecían en terapia intensiva, 80 en camas generales y se produjo en Rosario la muerte de una mujer de 88 años y de un hombrede la misma edad en Casilda, lo que hace un total de 26 muertos con coronavirus, con una tasa de mortalidad del 1 por ciento a nivel provincial. En tanto, el porcentaje de recuperados ascendió al 61,5 por ciento y hubo 22.627 test descartados.
Cudós indicó que la concentración de casos se viene registrando en el sur, pero aclaró: "Vemos cómo la enfermedad se extiende a otras ciudades santafesinas y alrededores", para ejemplificar los contagios en Tacuarendí, Villa Ocampo (donde no hubo nexo claro), pero que "podrían tener una reintroducción de casos".
Renglón seguido, la funcionaria citó el caso de Margarita, "con contacto estrecho por viaje a Buenos Aires, que vuelve de allí dando positivo y en aislamiento, pero se junta con amigos en un asado".
En Laguna Paiva también se registraron casos de personas que habían viajado. "La lista de ciudades afectadas es más grande y aumenta. Hay que ser altamente cuidadosos, porque es un virus de alta contagiosidad . Pese a que una persona se sienta bien, se deben cumplir las pautas sanitarias. Nos tenemos que cuidar y permanecer en los hogares es uno de los mejores modos de prevención", señaló la funcionaria.