Una rivalidad que fue creciendo con el tiempo. La presencia de tres de los cinco mejores jugadores de todos los tiempos. Una deuda pendiente para los argentinos. Una chapa reciente que lucen los brasileños. Todo eso y más encierran los 100 partidos que disputaron desde 1914 Argentina y Brasil, que con la última victoria, el 16 de octubre de 2018 en Yeda por 1-0, quedó arriba con 38 triunfos contra 37 y 25 empates.
Claro que todos los choques no son iguales. Hay encuentros oficiales de competición (Eliminatorias, Mundiales, Copa América) y otros simplemente amistosos oficiales (la vieja Copa Roca, la actual Copa de las Américas, o la mismísima Copa de las Naciones de 1964). Y en ese debe y haber, la deuda argentina crece. Y mucho más en Brasil.
En tierras brasileñas, hubo 36 visitas argentinas, con apenas 8 victorias, 7 empates y 21 derrotas. Ya van dos décadas del último festejo, el 29 de abril de 1998, en el Maracaná de Río de Janeiro, con el recordado gol del Piojo Claudio López, en uno de los amistosos previo al mundial de Francia de la era Passarella. Luego, hubo un empate y seis derrotas.
Todos los encuentros que ganó Argentina en Brasil fueron oficiales amistosos, ninguno de competición. De 10 encuentros por los puntos, apenas empató dos y perdió ocho. Los primeros seis fueron por la Copa América: 1-3 en 1919, 0-2 en 1922, 1-2 en 1975, 1-2 en 1979, 0-0 en 1983 y 0-2 en 1989.
Los otros cuatro por las Eliminatorias Sudamericanas a partir del formato todos contra todos (antes, cuando se jugaba en zonas, nunca los ubicaban juntos). Perdió 3-1 en 2000 (para Corea/Japón 2002), también 3-1 en 2004 (Alemania 2006), fue 0-0 en 2008 (Sudáfrica 2010) y cayó 3-0 en 2016 (Rusia 2018).
De las ocho victorias de la Selección en Brasil, cinco fueron por la Copa Roca, disputada entre 1914 y 1972, trofeo donado por Julio Argentino Roca para confraternizar y mejorar las relaciones políticas, económicas y sociales. El deporte como excusa. El 15 de enero de 1939, en Río de Janeiro, Argentina goleó 5-1. Después hubo un 3-0 en 1940, un 4-3 en 1945, 2-1 en 1957 y 3-2 en 1963.
Tal vez la más trascendente victoria argentina en Brasil fue el 3 de junio de 1964 en el estadio Pacaembú de San Pablo. Ese año, la Confederación Brasileña de Fútbol cumplía 50 años. Invitó a disputar un torneo, denominado Copa de las Naciones, a Argentina, Inglaterra y Portugal.
Brasil era bicampeón del mundo (1958 y 1962) y Pelé estaba en su esplendor. Argentina se recupera del desastre de Suecia. Amadeo Carrizo volvió al arco argentino y fue su gran revancha. El equipo ganó los tres partidos y fue campeón. A la verdeamarela la derrotó con un contundente 3-0 (Ermindo Onega y dos de Telch). Fue el día que Pelé, impotente, le pegó un codazo a José Mesiano que lo sacó de la cancha. Entró la Oveja Telch y anotó dos goles. La otra victoria, antes del 1-0 de 1998, había sido en el amistoso del 4 de marzo de 1970 en Porto Alegre, por 2-0 con goles de Oscar Mas y Marcos Conigliaro.
El contraste se nota en los últimos 30 partidos disputados, después de la victoria por 3-2 en la Copa América de Santiago de Chile que ganó el equipo del Coco Basile. Desde ahí, hubo 8 victorias argentinas, 7 empates y 15 triunfos brasileños. Lo necesario para dar vuelta el historial.
