El nuevo Real Madrid de Santiago Hernán Solari dejó sentenciada la eliminatoria de dieciseisavos de final de la Copa del Rey contra el Melilla, de Segunda División B, con una contundente victoria por 4 a 0.
Además de Solari, el otro gran protagonista del Real Madrid fue el brasileño Vinicius, que jugó todo el partido y, aunque no marcó, se mostró muy activo, dio una asistencia y participó en muchas de las jugadas más peligrosas del equipo blanco.
El Real Madrid apenas sufrió en la primera mitad, excepto en los primeros quince minutos, en los que el Melilla comenzó llevando la iniciativa, hasta que el equipo de Solari se sacudió la presión inicial de los melillenses y empezó a madurar el partido, tocando bien el balón desde atrás para salir con gran velocidad.
El gol del Real Madrid se veía llegar y Lucas Vázquez dio un aviso en el minuto 23, pero el arquero local se lució, despejando a córner, hasta que cuatro minutos después los de Solari acertaron a marcar en una gran jugada por la derecha de Odriozola, que pasó el balón a Benzema y éste lo empujó a la red.
El Real Madrid se mostraba muy cómodo ante un Melilla que no se rendía, pero no llegaba a la meta de Navas, todo lo contrario que su oponente, que pudo marcar por medio de Asensio y Lucas Vázquez, hasta que en el tiempo añadido un perfecto servicio por la banda derecha de Vinicius acabó en el 0-2, obra de Asensio.
El Real Madrid se sentía muy cómodo con la ventaja de 0-2 y, pese a que no forzaba la máquina, pudo incrementar su diferencia en el complemento, en dos buenas oportunidades, pero en ambas Ceballos y Llorente se estrellaron con Dani Barrio, en los minutos 61 y 63, respectivamente.
En la recta final, el vigente campeón de Europa metió al Melilla atrás, sin dejarlo respirar, y marcó el 0-3 en una jugada de remates consecutivos de Asensio y Vinicius que se encontraron con dos soberbias paradas del portero local, pero la pelota finalmente quedó rechazada en la línea de gol y Odriozola lo empujó a la red.
El Real Madrid redondeó la goleada con el 0-4, obra de Cristo, de cabeza, tras un saque de esquina ejecutado por Ceballos.