Luego de dos caídas, frente a New Orleans Pelicans y Los Angeles Lakers, San Antonio Spurs se reencontró con el triunfo. Anoche venció 100-98 a Memphis Grizzlies en una nueva jornada de la NBA. El equipo de Gregg Popovich ahora apunta los cañones al partido que jugará el próximo viernes nada menos que ante Golden State, en el Oracle Arena de los Warriors.
En el partido de ayer, los Spurs recuperaron la senda ganadora y cosecharon el triunfo número 37 en la temporada, en la que acumulan 27 derrotas. La franquicia de San Antonio está quinta en la Conferencia Oeste y necesita volver a tener una serie de festejos seguidos. Apenas ganaron tres de los últimos 10 que jugaron.
Manu Ginóbili jugó 20 minutos y terminó con cuatro puntos, una asistencia y dos rebotes. El goleador de los Spurs fue Tony Parker, quien finalizó con 23. Los mismos puntos fueron los que marcó Marc Gasol en los Grizzlies.
La mejor jugada del partido no tuvo como protagonista a Manu, sino que fue una genial asistencia de Kyle Anderson, sin mirar, para el alley-oop de Davis Bertans, que desató el festejo de todo el banco de San Antonio, con Ginóbili incluido.