Un 20 de octubre, pero de 1976, el mundo del fútbol cambió para siempre. Ese día debutó Diego Armando Maradona con la camiseta de Argentinos Juniors. De ahí en más, desplegó su magia por Boca, Barcelona, Napoli, Sevilla, Newell's y la Selección Argentina, donde marcó un antes y un después al ganar el Mundial de México 86 y marcarle esos dos goles inolvidables a los ingleses. Este jueves se colocó una placa en su ex casa de Lascano (donde vivía cuando debutó) para homenajearlo y en charla con Radio La Red, el Diego se mostró agradecido con que lo hayan recordado.
<b>Las declaraciones de Diego:</b>
"Agradecido por todo lo que están haciendo por estos 40 años que cumplo en el fútbol, aunque son muchos más porque a mi la pelota me gusta desde hace mucho más. De chiquito, cuando Beto me regaló la pelota de cuero, ya le daba contra la pared. Es lo mismo que hace Benja".
"Agradecerle a todos los argentinos por haberse acordado. A un capo como Batistuta que por ahí hay gente ignorante que no lo conoce, chicos ignorantes que jugan a la Play y ponen cuatro o cinco nueves que están en el candelero pero que no le llegan ni a los tobillos al goleador, al animal como le decía yo".
"Todo lo que jugué, todo lo que di fue con felicidad. A pesar de la enfermedad, siempre luché para que mi equipo gane. Jamás mis equipos fueron para atrás ni paré un partido para que hagan gol. Al contrario. El que venía a jugar en contra, sabía que en la primera oportunidad que teníamos le hacíamos gol".
"Brindo por los 40 años. Porque mi vieja y mi viejo me están guiando desde el cielo y las cosas están maravillosamente bien. Tengo trabajo. Me lo gané a pulso. Estoy muy contento en Dubai. El exilio deportivo que me hicieron entre Grondona y otros dirigentes les salió mal porque acá tengo trabajo, acá encontré parte de mi casa y por supuesto que, para los que dicen de esto o lo otro, gano mucho más en serenidad y en paciencia que si estuviera entrenando en algún otro equipo".
"Les mando un saludo a los argentinos. Jugué para ellos. Defendí la camiseta como nadie y que el gran capitán soy yo. No hay ni habrá otro gran capitán como yo".
"Me encantaría que la gente tenga memoria. Así como le pasó a Batistuta, le pasa a muchos jugadores que nos hicieron sonreír en la cancha".
"Fui argentino, soy argentino y voy a morir argentino. Yo a la camiseta no la mancho, la tengo tatuada con la capitanía".
"Hasta los próximos 40 años de fútbol mío".