"El dolor va a ser de por vida, esta era nuestra oportunidad", fueron las primeras palabras de Javier Mascherano cuando terminó el partido y Argentina perdió la final del mundo. "Se nos escapó a lo último", reconoció.
"Esto es todo lo que podíamos dar, hoy nos vaciamos", sentenció con lágrimas en los ojos y tratando de contener el llanto. "Queríamos llevar la Copa del Mundo para Argentina pero no pudimos", sostuvo uno de los jugadores más importantes que tuvo la Selección a lo largo del certamen.
El "Jefecito" marcó su orgullo por el grupo de jugadores y pidió perdón a los hinchas. "Lo lamentamos mucho por todos los argentinos", precisó.
"Hay que levantar la cabeza y soportar este dolor", dijo con entereza pero asegurando que la derrota ante Alemania en la final será una marca imborrable. Argentina volvió a jugar una final del mundo después de 24 años y no pudo quedarse con la Copa.
Mascherano reconoció que "me quedo tranquilo por lo que dimos" y que "no había más que esto". "Tuvimos las mejores chances, nos sobraron 5 minutos", sentenció.
La tristeza de todos los jugadores quedó sintetizada en las palabras del que fue, a lo largo del torneo, el técnico adentro de la cancha. Lágrimas en los ojos de los ojos de los futbolistas argentinos, lágrimas de mucho dolor.