A fin de abril, un primer lote de las 21.000 dosis de Sputnik V elaboradas en el país por Laboratorios Richmond fue sometido a pruebas de calidad por el Instituto Gamaleya, en Rusia.
“Las vacunas producidas en el país, en principio serán para el Estado argentino, mientras dure esta pandemia. Después tendremos que formalizar el resto de los contratos para cuando se termine la fase productiva”, señaló Marcelo Figueras, presidente del laboratorio Richmond responsable de la producción.
Confirmó que “el laboratorio puede producir hasta 5 millones de dosis mensuales, tanto de la primera como de la segunda dosis. Comenzaremos por un millón y si todo está bien estarán listas en junio, seguramente”, dijo.
“Argentina es el primer país de América Latina que comenzó el proceso de transferencia de la vacuna Sputnik V, todo lo cual fue posible gracias a la colaboración del Russian Direct Investment Fund (RDIF) y de sus socios estratégicos. De no mediar dificultades, a la mayor brevedad posible, comenzaría una etapa de producción de Sputnik V en nuestro país”, agregó.
En una primera etapa, el principio activo llegara desde Moscú y se terminará la formulación, el filtrado y el envasado de los frascos en Laboratorios Richmond. En una segunda etapa, cuando se construya la nueva planta todo el ciclo de fabricación se hará en Argentina.
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