"Estamos muy sentidos, lamentamos lo sucedido", expresó Claudio Vignetta, funcionario provincial y miembro del Centro de Operaciones de Emergencia (COE) y la referencia es a la muerte de Solange Musse, quien falleció sin poder reencontrarse con su padre que debió regresar a Neuquén -desde donde había viajado para reencontrarse con ella- sin poder verla.
Vignetta planteó que lo que se hizo fue cumplir el protocolo. "Se le hizo el test rápido para intentar ayudarlo. Le dio positivo, lo que indicaba que posiblemente podía tener Covid-19. Por lo tanto se le hizo retornar a su provincia". Ese test se le realizó en Huinca Renancó, en el límite entre Córdoba y La Pampa, cuando ya había hecho 1000 kilómetros y lo hicieron retornar el mismo día, junto a su cuñada -quien tiene domicilio en Alta Gracia- y es discapacitada motriz.
"Si le permitíamos el ingreso poníamos en riesgo a la población de Alta Gracia", definió Vignetta. Musse insiste en su relato que pidió que lo hisoparan para tener la seguridad del resultado, pero en el puesto sanitario rechazaron la posibilidad y los obligaron a regresar con custodia policial.
En Huinca Renancó les realizaron el test a los dos. El de su cuñada dio negativo pero el suyo fue "dudoso". "Me hicieron otro y dio igual. Nunca me tomaron la fiebre, no me quisieron hacer el hisopado. Nunca pude hablar con ninguna autoridad, solo con las dos chicas del puesto sanitario y la policía", dijo el hombre.
Según su explicación, ni siquiera le dieron la opción de quedarse en uno de los hoteles reservados para quienes deben hacer cuarentena, sino que "ocho móviles policiales" lo acompañaron durante todo el camino de regreso a Neuquén. Fueron "postas" de patrulleros entre las distintas provincias.
<b>Fuente:</b> La Nación