Han transcurrido dos semanas del caso de Elías Benítez y hay dos líneas antagónicas que hasta el momento parecen no encontrar un punto en común. La autopsia realizada al cuerpo fue determinante en que el fallecimiento se debió a un ahogamiento sin intervención de terceros, pero la familia del joven afirma que lo mataron, e incluso señala a quienes habrían sido sus responsables.
El fiscal Jorge Gutiérrez ha ordenado todo lo concerniente al esclarecimiento y con las últimas medidas de rastrillar el río Gualeguaychú para buscar objetos que pertenezcan a Elías Benítez. No se han encontrado elementos en la causa que sostengan hasta el momento la posibilidad de que haya ocurrido un crimen.
Pero la familia no acepta esta posibilidad y le encomendaron a su abogado Fabián Otarán que realice todas las medidas necesarias para demostrarlo. Una de estas medidas se cumplimentó el jueves y la Justicia autorizó la extracción de muestras para un segundo informe forense.
El informe de la autopsia realizada en Oro Verde, que llegó a fines de la semana pasada, confirmó que el cadáver tenía “signos externos e internos de asfixia mecánica por sumersión, sin signos de participación de terceras personas”. Pero además, profundizó sobre una pequeña lesión que se encontró en el cuero cabelludo, al cual los médicos describieron que “no es suficiente para provocar muerte ni sumisión”. Sobre ello los especialistas consideraron que “se trató de un hallazgo incidental que puede corresponder a un trauma pre o perimorten”.
En diálogo con EL ARGENTINO, el fiscal Gutiérrez relató que no se observaron lesiones traumáticas al examen externo ni radiológico. “La cabeza no tenía edema ni sangrado, el cuello, el abdomen y el tórax tampoco tenían signos de trauma, y la tráquea cervical y el estómago tenían restos de barro”, agregó. También indicó que se extrajeron músculos para futuros estudios genéticos de ser necesario y material cadavérico para realizar estudios anatomopatológicos de los cuales todavía no se tienen novedades.
Por otra parte, el jueves y viernes durante la mañana, el fiscal Gutiérrez llamó a una ampliación declaratoria a la madre de Elías y a su hermana, pero también a una ex novia, una ex cuñada, un amigo que estuvo con el joven esa madrugada que desapareció y un vecino, al que le tocó la puerta y le dijo que lo estaban persiguiendo.