Un día antes de que venza el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que firmó Alberto Fernández con la última tanda de restricciones para frenar el impacto de la segunda ola de coronavirus, en el gobierno trabajan para determinar el alcance de las políticas que regirán a partir de mayo.
Pero por estas horas las máximas autoridades nacionales evalúan la continuidad de las medidas vigentes y, sobre esa base, sumar más controles y un puñado de medidas más restrictivas.
A diferencia de las últimas dos semanas, cuando hubo discrepancias fundamentalmente con la Ciudad de Buenos Aires, el Gobierno llega con mayor consenso político, a partir del sostenido alto nivel de contagios, que supera los 20.000 casos diarios desde hace diez días, en un contexto de alta ocupación en el sistema sanitario.
Fuentes del Ejecutivo informaron que los lineamientos generales del decreto anterior se mantendrían vigentes por otros 15 días, hasta mediados de mayo. Se planea implementar un sistema de fases -ilustrado con la figura de un “semáforo”-, que avance o retroceda según la situación epidemiológica de cada distrito de acuerdo a parámetros predeterminados.
Analizan también la posibilidad de introducir ampliaciones en el horario de límite a la circulación y en la forma de impartir la educación donde la situación epidemiológica sea más compleja, sea por horarios, días y niveles.
En tanto, se estudia la posibilidad de que los comercios atiendan a las personas desde la puerta. Nadie podría ingresar a los locales.
Las medidas aún están discusión. Faltan definiciones. Además, puertas adentro de la Casa Rosada, no descartan que Alberto Fernández pueda tomar alguna decisión específica que no está en discusión actualmente, tal como sucedió con la suspensión de las clases presenciales, señala el diario Infobae.
También evalúan que los profesionales - abogados, contadores, psicólogos - vuelvan a trabajar exclusivamente en forma virtual y desde sus casas; y avanzar con una nueva restricción en las actividades recreativas. Reducir los encuentros de personas es determinante para cortar la circulación del virus.
Las máximas autoridades tienen en cuenta el análisis que recibieron de parte de expertos en epidemiología y funcionarios de la cartera de Salud en la reunión del lunes; las evaluaciones que transmitieron los gobernadores en los cónclaves del martes -con los del Norte Grande- y el miércoles -con los del Sur y el Centro-.
Arriba de la mesa también tienen los datos de circulación y acatamiento de restricciones en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), que les entregaron desde el gobierno porteño y el bonaerense; los datos de circulación que evalúa el Ministerio de Seguridad, y la información sobre la actividad económica que proveen las carteras de Economía y Desarrollo Productivo.