El Comité Olímpico Internacional (COI) se vio acorralado. En medio de la pandemia del coronavirus los mensajes llegaban día tras día: en cuentagotas fueron lanzando sus veredictos Estados Unidos, Australia, Canadá y España. Varias de las grandes potencias. Los atletas, firmes y unidos. Ni una semana para pensarlo, ni tres meses, mucho menos 30 días. La realidad, cruda, no hizo más que exponerse de cara a la magna cita deportiva.
Cuando el coronavirus lo permita será tiempo de pensar en lo que viene. En principio, julio de 2021. Y en este tiempo, indefectiblemente, aparecerán beneficiados y perjudicados tras la decisión del COI. Aquellos a los que la postergación les permitirá recuperarse sin prisa de las lesiones; otros que entrenarán con más fuerza, madurarán como deportistas e inclusive apuntalarán la cabeza, esa que tanta relevancia tiene en el más alto nivel. El factor psicológico. Del otro lado surgirán aquellos a los que el paso del tiempo podría jugarles una mala pasada. Asoma lo inevitable. Son esos que tenían pensado dejar la actividad tras los Juegos Olímpicos . Allí donde la palabra "retiro" retumbaba en lo más profundo.
De entrada, vale una aclaración: lógicamente -y más allá del sueño olímpico-, los deportistas ponen como prioridad su salud y la del resto. El mundo debe combatir esta emergencia. "Hay mucha gente que la está pasando mal", coinciden todos ante la consulta de La Nacion. Hasta hoy, la delegación olímpica argentina tiene aseguradas 143 plazas para Tokio. Esos lugares no se los quita nadie (a excepción del tenis femenino, y aquí entra Nadia Podoroska, que está sujeto al ranking). Varios deportes quedaron a la espera de sus preolímpicos, una vez que se conozca la nueva fecha de los Juegos. La misión de la reorganización en todos los calendarios deportivos no será sencilla.
Apenas se supo la noticia, varios protagonistas que ya habían confirmado su retiro tras los Juegos (o que dejaron entrever la posibilidad) saltaron a escena: por caso Luis Scola, Paula Pareto, Gonzalo Carou, Sebastián Simonet, Matías Schulz y Juan Manuel Vivaldi son algunos. ¿Qué sucederá? Todavía es muy prematuro saberlo. Los Gladiadores de handball ya tienen algunas certezas: Carou, el capitán que en agosto cumplirá 41 años, estirará la actividad. "Voy a entrenar un poco más, no me queda otra", dice. Diferente es la situación del arquero Schulz, que confirmó su retiro para el cierre de 2020.
Para Juan Martín del Potro, doble medallista olímpico, asoma como una buena noticia. Este lapso le brindará al tandilense mayor tiempo de recuperación en la operación de rodilla. El tenista va día a día y si bien actualmente todavía no volvió a empuñar la raqueta, los Juegos Olímpicos siempre resultan un incentivo para él.
Delfina Pignatiello es otra atleta que podría contar con una ventaja. Sin haber llegado a su techo, la joven nadadora de 19 años (el 19 de abril cumplirá 20) sigue en la búsqueda de tener el rodaje necesario que le permita acercarse a una final olímpica. Cuando todo el calendario se reactive, le dará la posibilidad de sumergirse dentro de un mayor número de competencias internacionales.
Para la selección que dirige Sergio Hernández se abren varias aristas. Por un lado, lo beneficia ya que le da mayor tiempo de recuperación a dos jugadores lesionados que iban a llegar con lo justo: Patricio Garino y Luca Vildoza. Por el otro, la selección que logró la medalla de plata en el Mundial de China 2019 llegaba a Tokio con varios de sus jugadores en su máximo nivel: Facundo Campazzo, Marcos Delía, Nicolás Laprovittola y Gabriel Deck. Aunque sin duda la mayor preocupación se da en Luis Scola, que iba a retirarse y se tentó con Tokio 2020: el desafío lo atrapó y aceptó. El líder del equipo cumplirá 40 años en abril y esta modificación lo obligaría a jugar una temporada más en Olimpia Milano. Finalmente, surge el tema Hernández y su futuro. Su trabajo iba a ser hasta julio/agosto de 2020. Habrá que ver qué arreglo logra establecer con la actual dirigencia de la CABB.
El fútbol presenta un caso especial, ya que la selección debe formarse con jugadores Sub 23. Resta saber si habrá algún cambio en el reglamento. Para la Argentina no es un tema menor: entre los que pueden quedar fuera del torneo está Lautaro Martínez, nada menos. "Es todo muy reciente y tenemos que esperar. Como los Juegos van a seguir llamándose Tokio 2020, por más que se hagan en 2021, una opción es que permitan mantener a los chicos que jugaron el Preolímpico", apuntó el DT Fernando Batista.
En cuanto al hockey, en ambos seleccionados se presentan situaciones particulares. El caso más relevante se da los Leones: Juan Manuel Vivaldi tiene 41 años. El arquero y emblema buscaba que Tokio 2020 fuese el cierre de su carrera dentro del alto rendimiento.
Pareto, de 34 años, ya había avisado que se su retiró sería tras los Juegos Olímpicos. "Es una decisión lógica y hay que cuidar la salud por sobre todas las cosas", apunta. Se suman otros atletas dorados: Santiago Lange y Cecilia Carranza llegarían a la cita con 59 y 34 años, respectivamente: "Claro que esto nos afecta, pero eso queda en un segundo plano en relación a lo que está viviendo el común de la gente".