El resultado del encuentro (Alemania 2-Escocia 1) quedó en anécdota porque lo que recorrió los portales de todo el mundo fue el juego entre James Morrison y Cristoph Kramer, quienes, en tiempo de descuento, dejaron al descubierto su instinto infantil e hicieron reír a más de uno. Marco Reus cayó tendido en el suelo y entraron los auxiliares médicos para asistirlo. Mientras tanto, detrás de escena, el escocés le propuso jugar al 'Piedra, papel o tijera' al alemán para ver quién se quedaba con el balón luego del pique. Se ve que al británico no le interesaba mucho empatar.