Con la continuidad del entrenador Gustavo Álvarez confirmada y más allá que en el fútbol argentino reina la incertidumbre, en Patronato comienzan a construir de a poco lo que sería el plantel para la próxima temporada. Con la salida de un número importantes de futbolistas a los cuales se les terminó el contrato, sumado al retiro de un emblema como Walter Andrade, en el Rojinegro apuntan a moverse despacio en un mercado por demás austero.
Con la salida de la mayoría de los delanteros, el DT del Santo apuntó a un ofensivo que llegaría desde el ascenso. Se trata de Pablo Agustín Palacio, un juvenil de Independiente Rivadavia de Mendoza por el cual Patronato pidió condiciones.
El delantero, de 20 años debutó en la Lepra en la temporada pasada y desde el suelo mendocino se dice que Álvarez lo quiere "sí o sí". En su momento, Palacio fue sondeado desde el fútbol de Estados Unidos, aunque su pase finalmente no se hizo, señala <i>Uno</i>. Ahora tiene la chance de debutar en Primera División si es que Independiente Rivadavia lo quiere ceder a préstamo.
Por otra parte, el entrenador del Rojinegro pretende que los dirigentes encaren las renovaciones de los arqueros Matías Ibáñez y Federico Costa; de los defensores Cristian Chimino, Leandro Marín y Bruno Urribarri (está cerca de renovar) y de los volantes Damián Lemos, Dardo Miloc, Santiago Rosales y Nicolás Delgadillo.
Adelante, la continuidad de Cristian Tarragona es muy complicada por el dinero que Patornato debería desembolsar para que siga vistiendo los colores del club paranaense. En tanto, el paraguayo Gabriel Ávalos mostró sus intenciones de emigrar. Por último, el delantero Hugo Silveira, cuyo vínculo con Patronato venció el martes, ya se encuentra entrenando en el Querétaro de México.
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