Se sabe que la alimentación en el deporte es un tema clave. Los que no se cuidan no llegarán nunca al nivel de excelencia que se necesita para estar entre los mejores del mundo. Hoy no alcanza con ser un dotado. Ahora imaginen ser un jugador de fútbol extraordinario y encontrar un médico que tiene la receta justa para potenciarlo: Eso es Messi.
En una entrevista con el diario español Mundo Deportivo, Giuliano Poser, el médico que le cambió los hábitos a la hora de comer a La Pulga contó sus secretos. Reveló parte de la dieta que convirtió al futbolista del Barcelona en un jugador temible. Dijo que utiliza un método que se llama kinesiología aplicada, que consiste en hacer un estudio de la fuerza de los músculos y a partir de los resultados, dictaminar un tratamiento. Recalcó que cada persona es distinta y que todos reciben un atención diferente.
Ante la consulta sobre lo que es una buena alimentación, el profesional señaló que hay cinco componentes claves que son "gasolina super". Agua, aceite de oliva, cereales integrales, frutas, verduras frescas biológicas (no contaminadas con pesticidas, herbicidas y demás), frutos secos y semillas son la clave para que Messi sea un jugador completo.
Por otro lado detalló los alimentos que el jugador del Barcelona tiene prohibidos: "El azúcar. Es lo peor que hay para los músculos. Mientras más lejos se esté del azúcar, mejor. Las harinas refinadas también son un gran problema, básicamente porque hoy en día es muy difícil encontrar un grano de trigo sano, sin contaminar". También hubo un párrafo sobre el consumo de carne: "En la medida justa. Muchísimo menos de lo que habitualmente comen los argentinos y uruguayos, porque es un alimento difícil de digerir para el organismo".
Poser, que también atiende a Demichelis, el Kun Agüero, Vietto e Higuaín dijo que su tratamiento es efectivo siempre y cuando se combine con otras actividades como la homeopatía y la kinesiología. También dijo que "es determinante tener energía positiva", sobre todo en un ambiente como el del fútbol.
Por último, contó que atender a Messi convulsionó su vida. Indicó que durante los primeros meses su teléfono no paró de sonar y que lo llamaban de todos los medios del mundo. Y no es para menos: es el gran responsable de que Messi se haya convertido de un humano a una máquina.