En la fecha anterior, disputada el sábado pasado, Erik Lamela había convertido un gol en el 3 a 0 del Tottenham al Norwich. Hoy, 48 horas después de aquel triunfo, el equipo dirigido por el argentino Mauricio Pochettino volvió a ganar y Lamela la metió de nuevo.
El jugador argentino hizo el primero, tras una larga corrida y una gran definición. Pero Erik no fue noticia sólo por abrir el marcador sino por recibir un patadón que figurará como las infracciones más fuertes de la Premier en esta temporada. Iban 18 minutos del segundo tiempo cuando fue a disputar una pelota y recibió un planchazo descalificador de Nathan Aké, el defensor holandés del Watford, quien vio la tarjeta roja. Lamela, por suerte, pudo seguir jugando y completó los 90 minutos.