Después de casi un mes de votación, la UEFA anunció al ganador de la terna Mejor Gol de Europa. Como era de esperar, el que se hizo con el premio no fue otro que Lionel Messi.
El capitán de la Selección Argentina se consagró gracias al tanto convertido en el partido entre Barcelona y Bayern Munich. Aquella tarde-noche, el rosarino dio clase al dejar en ridículo a su rival, Jerome Boateng, quien cayó al suelo ante la magia de Lionel.
No la tuvo fácil el radicado en Cataluña: debió superar a rivales de la talla de Cristiano Ronaldo, Neymar, Aaron Ramsey y Erik Lamela, entre otros.