Este miércoles por la noche explotó la noticia del doping positivo de Santiago Silva. Como medida provisoria, el delantero quedó suspendido hasta que se conozcan los resultados de la contraprueba.

La prueba fue realizada el 12 de abril pasado luego del partido de la Copa de la Superliga entre Gimnasia y Newell's. Al futbolista le detectaron altos niveles de testosterona.

La testosterona es una hormona sexual masculina que tiene efectos morfológicos, metabólicos y psíquicos. El uruguayo confirmó que se estaba realizando en un tratamiento de fertilidad -que podría haber incluido la colocación de un chip sexual, que contiene pellets de testosterona bioidéntica que se obtiene de plantas-. Este chip, que tiene el tamaño de un grano de arroz y se coloca en la cintura, es una de las nuevas alternativas para la reproducción asistida.

Silva se expone a una pena de hasta dos años de suspensión. Es por esta grave sanción y, tan larga en lapso de tiempo, que desde Argentinos ya comenzaron a trabajar en su defensa y el descargo ante la Comisión Nacional Antidopaje, señala Doble Amarilla. Pese a que el cuerpo médico de Argentinos no estaba informado de este tratamiento acompañará al uruguayo en este descargo.

Además, los asesores letrados del club de La Paternal citarán el caso de Mario Grana en 2001, que no fue sancionado por un caso similar de un tratamiento de fertilidad asistida. El delantero, que llegó libre en julio de este año, había firmado su vínculo con el Bicho hasta el 30 de junio de 2021.