El paranaense Federico Garmendia, de 38 años, falleció en Ibiza, España, tras caer desde un tercer piso. El hombre vivía en Europa desde hacía tiempo. Hasta el momento, se desconoce el motivo de su muerte y la Policía Nacional de España investiga si se trató de un accidente o de una caída intencional.
En medio del dolor, Joaquín, el hermano de Garmendia, contó que manejan una teoría sobre lo que le pudo haber ocurrido.
Hasta el momento, la hipótesis que manejan los parientes de Federico, que era DJ, es que se trató de un accidente: “Parece que se descompensó y estaba al lado de la ventana de su habitación”, contó Joaquín Garmendia.
“Hubo rumores de que se suicidó, pero la persiana estaba mal cerrada y, según dice la policía, la forma en la que estaba abollada parecía un golpe accidental. Si él hubiera hecho eso, se notaría una mínima planeación. La persiana estaba cerrada y hasta era insegura”, explicó.
Joaquín dijo que también se descarta la hipótesis de un crimen porque los investigadores “no encontraron nada raro en su habitación, no había señales de robo”.
“Por supuesto, son todas elucubraciones con base en hipótesis”, remarcó el hermano de la víctima y aclaró que la familia deberá esperar a que María Garmendia, que viajó a España, llegue a Ibiza para recibir más información.
Estaba solo
De la investigación preliminar, se supo que Federico Garmendia estaba solo. “No había nadie ahí. Lo raro es por qué se pudo haber caído y qué le pasó para que se descompense y caiga”, señaló el hermano. Según contó, el joven de 38 años era “bastante saludable, hacía pesas” y se ejercitaba con frecuencia.
Tras la caída, ocurrida el lunes en la mañana, “lo encontró una chica que iba paseando a los perros”. Enseguida llegó el personal médico y comenzó a realizarle maniobras de reanimación cardiopulmonar durante 15 minutos. Pese a los esfuerzos, no lograron salvarlo.
Fondos y repatriación
Por otra parte, Joaquín aclaró que la recaudación de fondos que se difundió era solo para “familiares y amigos”, no estaba previsto que trascendiera a los medios y redes sociales. Destacó que el anuncio, por la buena intención de la comunidad, se viralizó. “Pareciera que era para el público, pero no era el caso”.
Además, lamentó que si bien hubo desconocidos que republicaron por solidaridad, recibió muchos “comentarios maliciosos”. “Imaginate que te digan que se te muere un familiar y tenés que pagar $20 millones. Sus amigos hicieron una vaquita y entre nosotros juntamos. Nos deshicimos de todo lo que teníamos para poder pagar. Con esfuerzo, nos podemos hacer cargo”, señaló.
"Todo el mundo lo amaba"
Garmendia se mudó a Ibiza en 2010. Era DJ y también trabajaba como seguridad en boliches.
“Él decía que estaba juntando para venirse a invertir en Argentina, pero él amaba Ibiza, le encantaba. Era superquerido, todo el mundo lo amaba, era una excelente persona”, dijo su hermano mayor.
“Nos había comprado las entradas a mi papá, a mí, para ir a ver a Boca en La Bombonera y el lunes me avisan que se murió. Él era medio loco, terco y atolondrado, habíamos tenido una diferencia, pero en los últimos meses nos hicimos saber que nos queríamos y es un poquito de alivio. Lamentablemente, no pudimos darnos ese abrazo de reconciliación”, concluyó, en diálogo con TN.
La dolorosa despedida de su papá
Su padre, Alberto Joaquín Garmendia Salas utilizó Facebook para despedir a su hijo. "Lloro y lloro y no voy a parar de llorar, se me fue un pedazo de mi vida, no lo puedo creer y no lo voy asimilar... duele, mierda que duele... y allá lejos ahí va ir tu hermana la que compartiste los nueve meses de gestación a buscarte para que quedes en casa", escribió
Y sumó: "Ay Federico, qué dolor, ¿por qué tanto dolor? Si vos fuiste feliz a tu manera y era lo que me interesaba. No sé hasta cuando voy a soportar este dolor, pero nos volveremos a encontrar y descansaremos en PAZ...". Y cerró con: "Chau, mi amado hijo... hasta que nos volvamos a encontrar".