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Los Pumas jugaron mal y cayeron ante Escocia

La Selección Argentina de Rugby, que contó con la presencia del paranaense Ortega Desio, tuvo un flojo rendimiento en Murrayfield, donde perdió ante su par de Escocia por 41 a 31. Trago amargo luego de la gran victoria en el Championship.

8 de Noviembre de 2014
La diferencia no fue mayor por los dos tries de Cubelli en el final.

Los Pumas no hicieron pie en Murrayfield, Escocia no perdonó una y fue goleada. Un golpe duro para la Selección, que venía entonada luego de la victoria sobre los Wallabies, pero que tocaron tierra y ahora deberán levantar. Fue 41-31, decorado con dos tries sobre el cierre, para que la diferencia no se acerque el 49-3 de 1990 en ese mismo estadio. El Cardo pinchó y lastimó.

 

De entrada, golpe argentino. Buena presión, mejor tackle de Montero, recuperación y corrida de 70 metros de Ortega Desio hasta el ingoal: 7-0 al minuto de juego. Sin embargo, fue la única vez que Los Pumas dominaron el marcador, la posesión y el territorio. Los dos Gray apoyaron, Richie y Jonny, y así cambió el tablero, que marcaba 14-10 para los locales, por el penal de Nico Sánchez. La situación que cambió el primer tiempo y, en realidad, el resto del partido, fue la amarilla a Juan Imhoff, que metió un hombrazo sin pelota. Con 14 en cancha, sin Báez ni Creevy -lesionados-, Argentina recibió 17 puntos y el PT terminó 24-10. Argentina pecó con la floja defensa y con malas decisiones a la hora de atacar.

 

En el complemento, Hogg capitalizó una avivada de Laidlaw, la figura del partido, y el mismo medio acertó un penal para llevar la distancia a 24 puntos. Muchísimo. A partir de ahí, llegó una especie de reacción. El scrum, algo que no anduvo bien durante el encuentro (penales y free kicks en contra) provocó un try penal. Al toque, Seymour interceptó un pase largo y otra vez a 24. Sobre el cierre, Cubelli sumó un buen doblete para achicar un tablero que quedaba muy feo. Fue una mala prueba. Lo positivo es que fue ahora, y no por los puntos del Champ o del Mundial.

 

La sensación que queda es que fue un paso atrás. Luego del salto en el Championship, con la victoria sobre Australia, este golpe tiene que hacer efecto. Es trabajo para Hourcade, para ver si pasa por falta de concentración, exceso de confianza, algo de relajación, errores individuales, falla en el plan de juego o lo que sea. Por lo pronto, habrá revancha pronto, el sábado que viene frente a Italia en Genova. Y el siguiente, vs. Francia en París. A levantar.

Los Pumas