A días de disputar ante Alavés la final de la Copa del Rey (será el próximo sábado), Lionel Messi recibió un duro revés. El Tribunal Supremo confirmó la sentencia de la Audiencia de Barcelona que condenó a Lionel Messi y a su papá, Jorge, a 21 meses de cárcel por tres delitos de fraude fiscal en los ejercicios de los años 2007, 2008 y 2009. Durante ese período, dejó de ingresar más de cuatro millones de euros a las arcas públicas.
La sentencia cuenta con tres votos concurrentes, que coinciden con la condena pero discuten algunas cuestiones técnicas.
La agencia AFP, en tanto, relató que los cinco magistrados del tribunal mantuvieron el criterio expuesto en primera instancia por la Audiencia de Barcelona conforme el futbolista, a pesar de alegar desconocimiento de la gestión de su fortuna, actuó con dolo. "No resulta acomodado a lógica admitir que quien percibe importantes ingresos ignore el deber de tributar por ello", afirma el Supremo en su sentencia, destacando que Messi intervino personalmente en esas actuaciones.
En cualquier caso, como la pena es inferior a dos años y no hay otros antecedentes, se descarta que los Messi vayan a prisión, ya que en esos casos el ingreso es suspendido por parte del tribunal que firma la sentencia mientras no se incurra en otros delitos. Ahora bien, la última palabra al respecto será de la Audiencia de Barcelona, el tribunal firmante de la sentencia que ha confirmado el Supremo. El fiscal, por lo pronto, pidió que se ratificara la sentencia.