El domingo pasado se cerró la etapa de inscripciones y las cifras no dejan de sorprender a los organizadores. "Hay 202 remeros inscriptos y cada uno puede participar en tres regatas, lo que hace un total de 600 inscripciones", contó este jueves el dirigente Ricardo Álvarez en diálogo con <i>Análisis Digital.
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España, México, Brasil, Paraguay, Uruguay y Argentina son los países que tendrán representantes este fin de semana desde la virtualidad, ya que los participantes competirán a través de sus simuladores y desde sus casas. Entre ellos sobresalen algunas figuras internacionales como el campeón panamericano Joel Romero (integrante del equipo argentino de Ocho con timonel que ganó el oro en Lima 2019), la española Virginia Díaz (clasificada a los próximos Juegos Olímpicos de Tokio) y su entrenador Marcos César Morales, monarca europeo y mundial de la especialidad, hoy integrante del Club Raspas de Bilbao.
"La verdad que sorprendió la convocatoria porque no pensamos que iba a haber tantos inscriptos. Porque, si bien se hacen regatas virtuales, no se realizan con esta modalidad, ya que habitualmente son individuales. Esta es individual, pero también se pueden hacer duplas y cuartetos. Es el mismo formato de una regata real, pero se hace a través de simuladores: los remeros no se ven entre ellos y hacen la misma distancia que en el remo real pero desde sus casas", comentó Álvarez.
Una de las novedades según los organizadores es que los participantes podrán realizar la distancia completa de cada prueba, a diferencia de otras regatas virtuales desarrolladas en esta temporada. "Hubo competencias organizadas en Uruguay y Paraguay este año que eran individuales, pero en las competencias por equipos se dividían las distancias, los remeros no hacían esa distancia completa", enfatizó.
La inactividad provocada por el nuevo coronavirus hizo que desde la ACRER se plantearan la posibilidad de organizar esta regata virtual. La misión era sacar del tedio a los remeros, afectados sensiblemente por el aislamiento social preventivo y obligatorio desde mediados de marzo. "La iniciativa se tomó porque hace tres meses no se hacía nada, el remo es un deporte al aire libre y los entrenamientos tuvieron que comenzar a hacerse en ambientes cerrados. Había un bajón de los chicos que venían entrenando a full en marzo y de repente se les cortó la actividad. Era una forma de mantener el espíritu de competición", resumió.
Lo que sin dudas no esperaban era, más allá de los centenares de anotados, los pergaminos de quienes llenaron el formulario para ser parte de la competencia. "Un campeón panamericano de Lima, una remera española clasificada a Tokio, campeones argentinos y sudamericanos. No sorprendió tanto la cantidad sino la calidad", graficó Álvarez.
Por todo lo que se generó con la primera regata virtual del país, desde ACRER ven con optimismo la reapertura de algunas actividades exceptuadas de la cuarentena. "Esto nos dio un envión. Además, en Paraná se está liberando de a poquito y se está comenzando a salir al río. Pero esto (del aislamiento) nos afectó. No es lo mismo estar remando en el medio del río que estar en tu dormitorio o encerrado en un departamento", culminó el dirigente.