En las últimas horas, se creía que la balanza se inclinaría definitivamente hacia jugar el encuentro el 20 de enero en Mar del Plata en el marco del Torneo de Verano, aunque la “falta de quórum” en la reunión de la AFA forzó un “cuarto intermedio”. De todas formas, será muy difícil evitar que se juegue.
La controversia se había generado en julio de este año cuando, dos meses después de que todos los medios dieran a Vélez como ganador de la plaza de fase de grupos por diferencia de gol, la AFA afirmó que a igualdad de puntos entre el Fortín y el Xeneize se debía dirimir la clasificación en un desempate. El asunto se dilató luego debido a que, en caso de repetir título River, ambos hubiesen conseguido su plaza, y pese a que este tipo de cruces deben jugarse a las 72 horas de finalizada la competencia en cuestión.
Mientras en Boca dan por sentado que el partido es un hecho, por Liniers se niegan a disputar el pleito amparándose en el antecedente de la temporada 2009/2010 (cuando el primer puesto de la acumulada se definió por diferencia de gol) y en el hecho de que Boca disputó la Sudamericana 2014 avalado por la AFA como segundo de la general, ya que de haber sido primero se encontraba excluido por el reglamento.