La Cámara de Diputados ha formalizado la citación para una sesión especial que se llevará a cabo este miércoles a las 11:00, con el objetivo de rechazar el veto presidencial a la ley que aumentaba los recursos para las universidades. La iniciativa fue solicitada por bloques dialoguistas y el kirchnerismo, en respuesta a la reciente decisión del Gobierno.

El secretario parlamentario, Adrián Pagan, convocó la sesión en medio de la presión ejercida por la Unión Cívica Radical (UCR), Encuentro Federal y Unión por la Patria, quienes solicitaron el encuentro tras la comunicación oficial del veto el pasado jueves.

Para lograr el rechazo al veto presidencial, los bloques de la UCR, Encuentro Federal, la Coalición Cívica, la izquierda y UxP deberán reunir el respaldo de dos tercios de los diputados presentes en la sesión. En este contexto, la postura del PRO será fundamental, ya que, bajo la dirección de Mauricio Macri, se está evaluando si acompañarán al Gobierno, como sucedió anteriormente con el veto a las jubilaciones.

La última ocasión en que estos bloques opositores intentaron rechazar un veto presidencial fue con el aumento de las jubilaciones, donde fracasaron al recibir solo 77 votos frente a los 87 que logró el oficialismo, junto al PRO y otros aliados.

La presión sobre el Gobierno se intensificó tras la multitudinaria marcha del miércoles pasado, donde universidades y partidos opositores se manifestaron en contra del veto. Al día siguiente, el Gobierno publicó en el Boletín Oficial su decisión de rechazar la ley aprobada por el Congreso, notificando al presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem.

La oposición ha presentado tres pedidos de sesión de manera separada, y el desafío ahora es reunir más votos que en la anterior votación del 15 de agosto, donde la ley fue sancionada con 144 votos a favor, 77 en contra y una abstención. En aquella ocasión, la falta de asistencia de varios diputados de la oposición fue un factor decisivo.

Con la mirada puesta en la sesión del miércoles, la oposición buscará consolidar su apoyo y superar el umbral necesario para revertir el veto presidencial y garantizar un mayor financiamiento para las universidades del país.