La eliminación de Boca Juniors en la Copa Sudamericana 2024 a manos de Cruzeiro dejó una profunda huella en el plantel y en su entrenador, Diego Martínez, quien mostró su apoyo a los jugadores y analizó la derrota con palabras llenas de emoción y orgullo.
Al consumarse la eliminación por penales en el Mineirão, lo primero que hizo Martínez fue acercarse a Miguel Merentiel, quien falló el penal decisivo, para consolarlo. El entrenador, que vivió el partido con una intensidad palpable, no dudó en acompañar a su jugador en ese difícil momento.
"Se lo dije a los jugadores antes de los penales: me siento orgulloso de ser parte de este grupo. Es difícil afrontar esto con una expulsión tan temprana. Pero el equipo dio la cara, entendió cómo jugarlo y tuvo situaciones claras hasta para empatarlo. Tengo mucha tristeza, impotencia y bronca. Pero quiero resaltar lo que hicieron estos futbolistas que dejaron a la institución bien representada," comentó Martínez, destacando la entrega de sus dirigidos.
Durante los 90 minutos, el técnico de Boca transitó una montaña rusa de emociones. Desde el borde del campo, se le vio morderse las uñas en momentos de nerviosismo y, en otros, con un dejo de satisfacción por la manera en que su equipo se plantó con autoridad, a pesar de jugar con un hombre menos tras la expulsión temprana de Luis Advíncula. A pesar de intentar mantener la calma, la intensidad del partido llevó a Martínez a vivir el encuentro al límite.
"Es fútbol. Luis (Advíncula) estaba destrozado, muy triste. Sólo fui a abrazarlo. Hay que acompañarlo, al igual que a Miguel (Merentiel). Fijate cómo es el fútbol, a dos de nuestros mejores futbolistas les pasó lo que les sucedió. Pero se van a comenzar a mentalizar en lo que viene," expresó Martínez, mostrando su apoyo a los jugadores que más sufrieron el resultado.
El entrenador no ocultó su percepción sobre la derrota, insistiendo en que fue inmerecida: "Las dos situaciones más importantes de este año, el equipo perdió de manera injusta, tanto en la Copa de la Liga como en esta competición. Va a costar dormir. Todas las derrotas duelen. El esfuerzo que hicieron los muchachos apacigua un poco el dolor, pero siempre duele."
A pesar del golpe, Martínez resaltó el carácter y la reacción del equipo, subrayando la importancia de mantener la cabeza en alto: "Vamos a seguir como lo venimos haciendo. Es muy doloroso, pero vamos a reponernos de este duro golpe. Sentíamos que íbamos a pasar. La última de Miguel (Merentiel), tendría que haber sido gol, el grupo merecía pasar."
El técnico también compartió cómo el plantel digirió la eliminación, pidiendo mantener la fortaleza y el enfoque en lo que viene: "Al grupo lo vi muy dolido, pero con mucha gente arengando y rescatando el esfuerzo que se hizo. Vi un vestuario muy fuerte, con mucha personalidad. Un vestuario de hombres. Vamos a salir trabajando. Vamos a sacarlo adelante entre todos."