Las exigencias sanitarias que impone esta etapa de pandemia sobrepasaron las fronteras del colapso en centros de salud de Rosario y la región. El martes pasado, las autoridades del Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria tuvieron que sumar un container refrigerado porque se saturó la morgue con fallecidos con coronavirus. En tanto, ayer, se vivió una escena de similares características en las instalaciones del Policlínico Pami I, cuyos responsables también debieron solicitar un contenedor con acondicionamiento térmico, teniendo en cuenta esta situación de desborde.
Los estrictos protocolos que requiere el Ministerio de Salud de la Nación para los fallecidos con coronavirus derivan en más tiempo de permanencia, y eso supera la capacidad de la mayoría de los efectores.
Debido a que las estructuras sanitarias no pueden contener el alto número de contagios y fallecimientos en la población de adultos mayores, el edificio de Sarmiento al 300, sede del Pami I, albergó ayer episodios de enorme tensión. Para conservar los cuerpos hasta que puedan ser retirados, debieron improvisar un depósito con aire acondicionado en la sala de Ecografía.
"Reclamamos la instalación de un camión frigorífico hace dos meses, cuando los empleados comenzaron a percibir que las estructuras del policlínico no iban a poder dar respuestas ante la gran cantidad de enfermos y fallecidos", señaló Guillermo Grand, gremialista de ATE y delegado de la Junta Interna del Pami I.
Si bien el sindicalista reconoció que "hay buena voluntad" de las autoridades locales que gestionan los dos policlínicos en Rosario, el dirigente aseguró que "las trabas burocráticas desde Capital Federal entorpecen el panorama".
Grand explicó la problemática. "En este momento, tenemos un montón de fallecidos y ya no tenemos dónde ponerlos porque las casas funerarias no los vienen a buscar porque no quieren tenerlos allí, ya que los dos crematorios que hay en la ciudad están desbordados", puntualizó y denunció desbordes e improvisaciones en la morgue.
"Hay capacidad para cinco cuerpos y ya se acumularon diez, sumados a los que están en Ecografía, con aire acondicionado para preservarlos hasta que puedan retirarlos", advirtió el gremialista.
Sobre la acumulación de cuerpos, Grand remarcó que sucede porque "no vienen a buscarlos de las funerarias, porque no pueden tener Covid positivos en sus instalaciones y hay colapso en los crematorios", y cuestionó: "El Pami no mira más allá de la General Paz, necesitamos que pongan los ojos en Rosario para poder resolver estos inconvenientes estructurales. El problema es que hace 20 años que no se invierte en infraestructura, y los años de macrismo junto a la pandemia terminaron por desbordar la estructura local".
<b>Desbordes</b>
En tanto, dos días antes se atravesó un trance parecido en el Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria. Tuvieron que instalar un container refrigerado para ampliar la capacidad de la morgue, donde son derivados los pacientes que fallecen con coronavirus en el Hospital Modular, y la pequeña sala del efector, con capacidad para cuatro cuerpos, se ve recurrentemente desbordada.
Debido a la multiplicación de contagios, este importante centro de salud regional atraviesa algunas jornadas de colapso. Y ante el escenario de saturación, las autoridades decidieron esa alternativa sanitaria. Desde el efector destacan que los protocolos que hay que cumplir con los pacientes que fallecen con Covid, implican más tiempo, entonces eso provoca que los cuerpos se acumulen.
Vale precisar que los protocolos para el manejo de estos cadáveres implican que las personas que participan en el traslado, deben contar con equipos de protección personal adecuados, similares a los recomendados para el personal de salud que atiende casos en investigación, probables o confirmados para infección por Covid-19, según disposiciones vigentes y cumplir con las normas de bioseguridad dispuestas por ley a tal fin, entre otros muchos requisitos. (La Capital)